Chaves justifica la reversión del Guadalquivir en los funcionarios

El revés sufrido por la Junta en la gestión del Guadalquivir, cuyas competencias fueron oficialmente devueltas ayer al Estado tras su publicación en el BOE, sigue trayendo cola. En el PSOE se esfuerzan por buscar justificación al desencuentro entre el Ejecutivo autonómico y el central. El vicepresidente del Gobierno y candidato al Congreso por Cádiz, Manuel Chaves, situó la decisión en el marco de "garantizar" la seguridad jurídica de los 849 trabajadores y funcionarios de la Confederación Hidrográfica.

Con este argumento, defendió que era la "mejor solución" tras las sentencias del Tribunal Constitucional y del Supremo que anulaban y dejaban sin efecto el artículo 51 del Estatuto de Andalucía. En esta línea se pronunció la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, aunque matizó que esta reversión de competencias es "temporal" hasta que se apruebe la delegación de las mismas según el artículo 150.2 de la Constitución, opción en la que está trabajando el Gobierno andaluz para lograr su objetivo. De hecho, aseguró que ambos ejecutivos van "de la mano" con "voluntad" de que la Junta pueda seguir ejerciendo sobre el Guadalquivir todas las funciones. "El mejor camino es el camino de la Constitución para que nadie pudiera mover lo que se consiga para la comunicación. Se está trabajando en todo momento para conseguir más y lo mejor, pero las sentencias y el informe de la Abogacía del Estado ponían freno y no había seguridad y es lo mejor para los trabajadores", subrayó.

La oposición, sin embargo, tiene claro quiénes son los responsables de esta situación. Tanto el PP como IU señalaron a Chaves y al presidente andaluz, José Antonio Griñán, pero desde distintas perspectivas. La portavoz del PP-A, Rosario Soto, les acusó a ambos de que en la negociación "han sido incapaces de favorecer a Andalucía" . En Griñán acusó "falta de capacidad de negociación, de liderazgo y de gestión" y achacó la devolución de las transferencias relacionadas con el río al Gobierno central a la "irresponsabilidad y el desgobierno" del PSOE en la región. Igualmente lamentó que se hayan perdido tres años en la gestión de la cuenca hidrográfica, que en ese periodo se hayan dejado de invertir mil millones de euros y que ochocientos trabajadores hayan quedado en situación de "inseguridad jurídica", además de no haberse mantenido ningún diálogo con los sectores implicados, como los agricultores.

El coordinador regional de IU, Diego Valderas, situó en la relación entre Chaves y Griñán la "única explicación" a la devolución del Guadalquivir y apuntó directamente a la "gran división" que hay en el PSOE. Anunció que va a solicitar la comparecencia "urgente" del Gobierno andaluz en el Parlamento para que dé explicaciones de "qué ha ocurrido para que una vez más el Gobierno de España dé la espalda a los andaluces".