Andalucía

Juanma Moreno confía en un proceso rápido que concluya en Núñez Feijóo

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. / R. D.

Juanma Moreno ha evitado desde el jueves pasado tomar partido de modo público en la crisis nacional desatada en el PP, pero su posición es la favorable a un nuevo liderazgo del gallego Alberto Núñez Feijóo. Y cuanto antes, con congreso extraordinario o mediante otra vía estatutaria. El presidente de la Junta se reunirá este miércoles con Casado en una reunión de presidentes del PP en cada territorio. 

Este martes, cuando Pablo Casado se ha quedado sin el apoyo de la mayor parte de sus leales, incluso de su equipo, el consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, ha solicitado "un nuevo impulso" para que el PP recupere el Gobierno de la nación. Es el "momento de la generosidad", ha indicado Bendodo en referencia a una posible dimisión de Pablo Casado como presidente del PP nacional. E

Moreno ha preferido quedarse en segundo plano, aunque nunca apoyó de modo expreso a Casado

El ataque de Isabel Díaz Ayuso a Pablo Casado y la réplica de éste dejó atónitos a la mayoría de barones del PP. También a Juanma Moreno, que era consciente del enfrentamiento entre ambos, aunque no creyó que llegasen al extremo de cruzarse acusaciones penales.

Desde el jueves, Casado solicitó a Moreno un posicionamiento público a su favor, pero el presidente. así como los miembros de su dirección, optaron por un silencio que, de por sí, ha sido muy clamoroso. En tales circunstancias, lo normal hubiera sido que respaldasen a su presidente  nacional, que había sido elegido en un congreso.

Todo cambió a partir del viernes, cuando se hizo imposible la reconciliación entre Casado y Díaz Ayuso, y el presidente del PP cursó una acusación grave de corrupción contra la presidenta dela Comunidad de Madrid. Fue este fin de semana, cuando todos los barones se han cruzado llamadas entre ellos, y a la vez con Génova, cuando tomó fuerza la celebración de un congreso extraordinario como única salida.

Juanma Moreno necesita una nueva dirección en el PP que no se entrometa en su Gobierno y sus alianzas

La opinión de Juanma Moreno ha sido tajante sobre el tiempo: él no puede esperar varios meses a que una gestora se haga cargo de la dirección o que Casado siga de modo provisional. El presidente debe convocar elecciones autonómicas en los próximos meses, y no puede tener al partido abierto en canal. Necesita una nueva dirección que le conceda autonomía en los asuntos de Gobierno y en sus alianzas.

Las injerencias llegaron al extremo con el acoso de Génova a Juan Marín

En ese sentido, Núñez Feijóo es la persona que mejor le viene a Moreno. Ha sido presidente de una comunidad autónoma, ha ganado varias veces por mayoría absoluta, es centrista como el andaluz y contó con su apoyo cuando Mariano Rajoy dimitió. En aquella ocasión, el gallego no se atrevió a dar el paso. Este martes, sin embargo, el presidente de la Xunta ha ofrecido su disposición. Desde Pontevedra ha declarado: "Todos, yo entre ellos, debemos tener la responsabilidad de estar a la altura de las circunstancias. Todos somos responsables de la situación y todos debemos estar a la altura de las circunstancias y tomar decisiones, yo entre ellos. Tomaré las decisiones en función de lo que observemos en el partido y el partido pida que haga".

La dirección de Pablo Casado ha venido intentando que Juanma Moreno convocase las elecciones andaluzas, incluso antes de la de Castilla y León. En el PP andaluz señalan a Génova como la autora de la filtración del audio en el que Juan Marín renegaba del proyecto de Presupuestos de 2022, un hecho que estuvo a punto de acabar con la legislatura. El hilo conductor de la oposición a Juan Marín en Génova es el ex dirigente de Ciudadanos Fran Hervías, que es uno de los asesores de Teodoro García Egea. Hervías es hoy militante del PP de Sevilla.

El enfrentamiento entre Génova y el PP andaluz se visualizó cuando se convocaron los congresos provinciales. La presidenta del PP de Sevilla y el de Almería son casadistas, así como los de Cádiz y Córdoba. Un grupo de dirigentes andaluces afines a Casado intentó el pasado lunes que Casado desplazase a Teodoro García Egea como secretario general para ampliar la dirección y dar cabida a más voces, pero no lo consiguieron.  

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