La Hermandad de San Bernardo está construyendo desde el pasado mes de octubre un colegio en Ángola para educar a niñas con edades comprendidas entre los 5 y los 16 años. Este proyecto fue una propuesta presentada por la diputación de caridad de la corporación para culminar los actos llevados a cabo en 2007 con motivo de la Misión Cofrade.

La escuela se ubica en la aldea de Namakunde, en la provincia de Cunne. Los terrenos para su construcción fueron cedidos por el gobierno angoleño a través de la Misión Santa Teresa de Jesús, perteneciente a la Congregación de misioneras de acción parroquial, que serán quienes desarrollen el programa educativo del centro y quienes lo regenten.

Esta congregación lleva trabajando en Angola desde 1970 y es una de las órdenes desplazadas a este país que tienen mayor experiencia en la labor docente. Según Enrique Rubio, diputado de caridad de San Bernardo, ha sido Manuel Sánchez, delegado de catequesis del Arzobispado de Sevilla, una de las personas claves en la consecución de este proyecto. Él fue quien en su día puso a la hermandad en contacto con la Congregación, que sirvió de intermediaria para la cesión de dichos terrenos.

La escuela -que llevará el nombre del Cristo de la Salud y la Virgen del Refugio- estará formada por dos aulas que atenderán entre ambas a una media de 250 alumnas. Los docentes procederán de la Congregación y estarán especializados en distintas materias. El hecho de que sólo sean alumnas las que tengan derecho a entrar en el centro se debe a la situación de indefensión total que sufren las menores en este país, donde además de ser marginadas por sus propias familias son presa fácil de las redes de explotación sexual.

La construcción del centro supondrá para la hermandad un desembolso cercano a los 35.000 euros. La corporación también se hará cargo de su mantenimiento tras su inauguración, prevista para principios del año que viene. Por ahora, ya se ha terminado la estructura exterior y en verano varios miembros de la junta de gobierno visitarán el país para supervisar el estado de las obras. Se colocarán entonces los retablos cerámicos de los titulares de esta corporación. Salud y Refugio. No hay mejor nombre para un país sumido casi tres décadas en una constante guerra.