La aldaba
Carlos Navarro Antolín
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¿Nunca has ido oído hablar de la polenta? Se trata de una sencilla receta originaria de Italia que resulta de la cocción de sémola de maíz con un poco de sal, el resultado es un alimento perfecto para una dieta saludable por su alto aporte nutritivo y dosis de fibra, fósforo, magnesio y antioxidantes. Entre sus beneficios se pueden destacar que facilita la digestión, regula los niveles de azúcar en sangre y fortalece los huesos al ser rica en magnesio. Su sabor es suave por lo que la convierte en un ingrediente perfecto para todo tipo de preparaciones. Se puede consumir de numerosas formas y aquí se enseñan 10 posibilidades para introducir la polenta en tu dieta.
Es la forma más sencilla de cocinarla y una de las más sabrosas. El resultado son barritas con una textura crujiente por fuera y deliciosa por dentro. Además, pueden ser una alternativa perfecta a las tradicionales patatas fritas como guarnición para cualquier tipo de plato.
En esta receta se necesita queso fresco y harina, para prepararla hay que realizar pelolitas con la polenta fría en las mano e introducir un queso fresco en el centro. Cuanto estén listas se meten en el horno durante 20 minutos para que sean más saludables, también existe la opción de freírlas en abundante aceite de Oliva Virgen Extra.
Si sobra polenta al cocinar un plato esta es una alternativa perfecta para aprovecharla. Cuando la polenta esté fría y cocinada se deja enfriar y se corta en forma circular, se pueden freír o hacer en el horno y servir con una ensalada al gusto.
Se preparan de una forma similar a los de sémola En este caso, los de harina de maíz tiene una textura más arenosa que los anteriores. Después de preparar una polenta tradicional, se le da forma a los ñoquis y se cocinan con ingredientes al gusto.
El resultado es parecido a un bizcocho con una miga húmeda y dulzona. Una alternativa dulce y saludable que no vas a poder parar de cocinar.
En este caso la pizza se hace solo con harina de trigo, lo ideal es que la polenta quede espesa y para poder realizar la masa se le dará un golpe de horno donde quedará con un delicioso toque crujiente.
Se trata de un plato muy nutritivo y de gran poder saciador. Es una forma magnífica de tomar verduras y se le puede añadir queso brie y huevo poché para que el resultado sea muy original.
Es una receta italiana que necesita al menos una hora de cocción a fuego lento. Para preparar el plano se necesita zanahoria, cebolla, apio y anchoas si se desean.
Es una buena opción para evitar la harina y el resultadoes un pollo rebozado crujiente. Para mejorar su sabor se le puede añadir pan rallado y marinar la carne antes de cocinarla.
Se realiza a partir de la polenta clásica y sirve de base para numerosos platos, se le pueden añadir espárragos cocinados partidos en dos.
Sus numerosas posibilidades a la hora de cocinarla convierten a la polenta en uno de los ingredientes de moda del momento.
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