'Calamity Inglaterra' fracasa ante Argelia (0-0)

Si por ahora la sorpresa del Mundial había sido la derrota de España ante Suiza, la impotencia mostrada por Inglaterra ante Argelia en el segundo partido del Grupo C le da el relevo. Empate a nada. Rácano además. Sin oportunidades claras y no precisamente ante un equipo encerrado. Los africanos fueron anárquicos pero valientes. Y sin recursos arriba, dejaron más detalles de calidad que los ingleses y gustaron más. Pero ahí está Inglaterra, con dos puntos, la clasificación a tiro y con el resultadista afortunado de Capello en el banquillo.

El partido, decisivo para ambos, se podría incluso haber jugado sin porteros. Tal vez ese acuerdo no habría sido mala idea para Capello ni su colega argelino, dados los quebraderos de cabeza que han tenido para relevar a Green y Chaouchi después de lo demostrado por los cancerberos en el primer partido. Los dos estuvieron en el banquillo dando paso a sus nerviosos sustitutos: Calamity James y Mbolhi. La soluciones hicieron algunas de las suyas en la primera media hora sin consecuencias -un inexplicable despeje de puños del inglés y otro con la pierna del argelino que no cazó Rooney por poco-, porque el encuentro lo podían haber jugado acostados en el palo.

Calamity le ha prestado el mote a su selección. Desconocida. Sin ninguna de las señas del fútbol inglés que tanto gusta. Verticalidad, llegada, velocidad... no han aparecido por ningún lado. Inglaterra practica una especie de híbrido italo-inglés que desprecia las virtudes de cada estilo y el recurso más fiable que tiene. Da grima ver como Rooney ha acabado el partido casi de mediocentro en lugar de dentro del área y Heskey, tosco como el solo, es el media punta que tiene que abastecerlo de balones parando melones.

Gerrard y Lampard, también irreconocibles. Como casi siempre que se juntan en el centro del campo inglés. Y el equipo lento a espensas de un fogonazo de Lennon, el único que da algo de aire en la banda que se ponga en este equipo de Capello, que se carga con su sistema a todo lo bueno que mete desde el banquillo -Defoe, Wright-Philipps ...- también sin manija en la mano del titular hoy Barry.

Atrás también de risa. Los argelinos, sin entrar mucho en el area, han tocado y jugado a su antojo en terreno inglés como si les valiera el empate. Lanzando incluso algunas faltas convertidas en peligrosas por el Jabulani y James en la portería.

Lo mejor para Inglaterra: sigue dependiendo de sí misma. Al estilo Capello. El fin justifica los medios y si le gana a la por ahora revelación de grupo, Eslovenia, estará en octavos. Como segundo o como primero -según lo que haga EEUU ante Argelia- pero estará. Y pese a que los pross estén desconocidos, hay que tenerlos en cuenta, aunque con este juego...

0 - Inglaterra: James, Johnson, Carragher, Terry, Cole, Lennon (Wright-Philipps, m.63), Gerrard, Lampard, Barry (Crouch, m.84), Rooney y Heskey (Defoe, m.74).

0 - Argelia: Mbolhi, Kadir, Bougherra, Belhadj, Yahia, Halliche, Yebda (Mesbah, m.89), Lacen, Boudebouz (Abdoun m.74), Matmour y Ziani (Guedioura, m.80).

Árbitro: Ravshan Irmatov (Uzbekistán). Amonestó por Inglaterra a Carragher y por Argelia a Lacen.

Incidencias: partido disputado en el Green Point Stadium de Ciudad del Cabo, a 1.400 kilómetros al suroeste de Johannesburgo. Terreno de juego en buenas condiciones.