Míchel defendió a su plantilla hasta las últimas consecuencias. En el último día antes del cierre del mercado, el entrenador del Sevilla hizo una exposición bien argumentada, salpicada con sus habituales toques de humor, para subir la estima de sus jugadores y, de paso, concienciar a una afición que igual pide protagonismo para la cantera como esfuerzo al club en fichajes.

Pero los profesionales mantienen los pies en el suelo. Míchel lo que hizo fue dar continuidad al análisis que días atrás había hecho Monchi y sacudió las conciencias de los que se rasgan las vestiduras pidiendo minutos para la cantera con la apuesta por un delantero como Álex Rubio, que irá a Vallecas por la lesión de Babá, según avanzó. "Ahí está lo que ha dicho mi director deportivo. Ésa es la realidad. Ya dije que estoy contento con la plantilla que tengo y más con el trabajo que hace. No pido nada porque veo que trabajan bien. Hemos tenido dos posibilidades de salidas en las últimas horas y los jugadores no se han querido ir", dijo el entrenador, que explicó que el club debe estar preparado y preguntar para no quedarse en fuera de juego: "Ante posibles salidas, cesiones, opciones de enfermedades largas como hemos temido (Maduro)... hemos tenido que estar investigando. Si lo de Maduro hubiera sido más grave, nos hubiéramos tenido que mover. Anoche mismo hubo una oferta por un jugador que no quiso irse... Hubierais dicho que cómo se afronta una conpetición con sólo dos futbolistas en un puesto".

Míchel tuvo el argumento perfecto cuando le preguntaron por la posibilidad de fichar a un delantero. "Hay un jugador de cantera que ha metido dos goles (en el amistoso de Los Barrios). ¿No queréis cantera? ¿En qué quedamos, macho? Llevamos en la convotaria a Álex Rubio, que es internacional, que ha estado en la pretemporada con nosotros y que es un jugador más. Si lo tengo que utilizar en Vallecas, lo voy a utilizar. ¿No queréis cantera? Encuentra a uno en el mercado con esa edad y con esas prestaciones. A lo mejor no lo encuentras", le espetó al periodista. Enseguida, lógicamente, salió el tema de Campaña: "El día que juegue... Si Rubio juega en Vallecas y mete dos goles, ¿me voy a poner a mirar si es de San Fernando o de Córdoba? Con Campaña ya hemos hablado de los escarceos que ha habido. Él sabe que aquí desde el principio es un jugador que cuenta y si no ha jugado más en verano es porque ha estado lesionado, pero en el partido más importante de la pretemporada jugó de titular. Lo único que le pido a Campaña es que rinda aquí lo mismo que si se fuera a otro lado. Que donde esté, luche por el puesto. Pues aquí igual. Aquí mejor, que es su casa. Y nosotros deseándolo...".

Y todavía había nombres propios en el tintero. Granero y su marcha a Inglaterra, por ejemplo. "Lo dijo muy bien el director deportivo. Lo que explicó es lo que pasó. Estamos en unas circunstancias en las que no podemos llegar más lejos. Este verano nos hemos visto en ocasiones con las manos atadas, pero no sólo nosotros, sino todos los clubes. Y luego está lo que os he dicho muchas veces, que también es cierto, que los jugadores van a donde ellos quieren", subrayó.

Sí es un refuerzo importante para Míchel la recuperación de Maduro. El técnico lo ve como una "referencia" en el vestuario y una pieza muy valiosa. "Es una alegría. Es un magnífico integrante de la plantilla y una bendición que esté porque es una alegría constante. Es justo lo que queríamos: rectifica y anima a los compañeros, tiene oficio, lo tiene todo. Lo vi muy ilusionado, tanto como nosotros con él".