El pasado jueves era operado a primera hora de la mañana Sergio Sánchez en Hamburgo por el doctor Hans Sievers, uno de los cirujanos más especialistas en enfermedades de la aorta. Todo salió bien, mejor de lo esperado, incluso, y habrá que esperar unos meses para saber si Sergio puede calzarse de nuevo unas botas.

Sin embargo, lo primero es la salud, y el padre del futbolista, Blas Sánchez, confirmó ayer que "su problema en el corazón ha sido subsanado, que vuelva a jugar dependerá de cómo evolucione". Después de tres horas de intervención, que se fueron a las cinco entre preparativos y el posoperatorio, "Sergio despertó feliz porque, según el doctor, todo había salido mejor de lo que él mismo esperaba. Ahora le duele un poco el pecho, pero es algo normal", explica el progenitor del defensa, que agradeció especialmente al jefe de los servicios médicos del Sevilla, Juan Ribas, su comportamiento: "Ha estado con nosotros en todo momento y fue el primero en dirigirse al cirujano tras la operación para explicarnos cómo había ido todo. Incluso nos ha hecho de traductor y explicado todo el proceso. También lo han llamado compañeros, Monchi y el presidente del club".

Si todo va bien Sergio Sánchez podría abandonar el centro hospitalario de Lubeck a finales de mes, "quizá el día 30", explica Blas Sánchez: "Le quitarán los puntos y si todo sigue bien irá a un centro especializado de rehabilitación, en Alemania también, otras tres o cuatro semanas". Así, en julio podría regresar a España.

¿Y cómo vivió la final de Copa? "Al principio decía que no quería saber nada hasta el día siguiente para no sufrir, pero acabó pidiéndome el móvil para seguirla por internet. Lo cierto es que entró en el quirófano más contento", apunta el catalán, que no se aparta de Sergio Sánchez, como su madre, su hermana y su novia. Hasta dentro de unos meses no se sabrá si podrá jugar de nuevo al fútbol, "pero la cosa pinta bien". "Su idea es volver a jugar y ahora está más confiado. Lo primero es la salud, pero él dice que si todo va bien firma lo que sea para jugar. Porque le han roto su vida y quiere recuperarla".