La derrota del sábado del Coosur RealBetis ante el Casademont Zaragoza sigue coleando. Por lo dolorosa que fue, deportivamente, y por el problema de la mesa y el marcador. Y es que si tras el choque Curro Segura aseguró que el parón afectó a su equipo "hasta el punto de reventarte", el director deportivo verdiblanco, Juanma Rodríguez, admitió que le sigue "dando vueltas al partido, porque fue una de esas derrotas que duelen".

Y es que para el directivo el conjunto bético "hizo méritos para ganar, siendo durante gran parte del partido superior" e incluso Porfi Fisac le dijo a Curro Segura que "tuvieron mucha suerte". Quizá esa fortuna fue el parón de "unos 12 minutos" por el problema del marcador que, "sin ser una excusa", aunque volvió a salir a la palestra, "perjudicó mucho al que estaba en mejor dinámica y dio aire al rival". "Los árbitros van mucho al instant replay y no es normal que no se puede adecuar al tiempo de forma instantánea. Hubo que resetear todo el marcador, poniéndolo todo a mano, y el parón perjudicó al que estaba más metido en el encuentro, al que llevaba el ritmo. Nos frenó", insistió en Radio Marca Sevilla Juanma Rodríguez, aunque añadió que "no hay que lamentarse y sí seguir trabajando con ambición y humildad".

No en vano, el malagueño destacó que del choque prefiere quedarse "con lo positivo" cara a los próximos compromisos, pese a que el cuadro hispalense afronta ahora "un calendario terrorífico" (salida a Vitoria, partido en casa con el Andorra, visita al Unicaja, duelo en San Pablo ante el Barcelona y dos choques seguidos fuera ante el Burgos y el Tenerife): "Lo que perdimos el otro día habrá que recuperarlo en algún sitio que no esperemos. Hay que seguir mejorando y afrontar los encuentros con ambición, pese a que el favorito sea el rival, como el Baskonia el próximo domingo. En este tipo de partidos hay que dar el máximo, ponérselo complicado al rival y no salir derrotados de antemano".

Entre lo positivo del último duelo Rodríguez destacó "la mejora en muchas facetas, como en la defensa", insuficiente por el apagón en el último cuarto, si bien confía en que el grupo seguirá dando pasos adelante: "El equipo no estuvo al completo hasta el 16 de septiembre, cuando llegó Slaughter. Después se lesionó Niang... Creo que hemos competido en todos los partidos. Tenemos calidad ofensiva, pero hay que mejorar atrás y eso no es sencillo. Un ejemplo es Izundu, que viene con una manera de defender el bloqueo directo muy distinta a como se hace en Europa. A él le decían que tenía que proteger el aro, meterse bajo la canasta, y aquí el entrenador le pide lo contrario, que salga adelante y corra después hacia atrás. Todo ese sistema defensivo necesita un tiempo", explicó.

Otro tema a definir, apuntó, es el de "los roles". "Yo creo que Slaughter va a ser cada vez más importante. Fue el primer fichaje y el último en llegar, tras jugar ocho partidos en 15 días con más de 30 minutos de media con Polonia. Él mismo nos dijo que estaba muerto. Había que darle descanso y gestionar su recuperación. Conger tampoco ha jugado mucho, pero su adaptación es diferente por su forma de jugar, ya que sus puntos vienen de un estilo determinado que hay que conocer. Y Whittington el otro día estuvo condicionado por las faltas", apostilló el director deportivo bético, feliz por el protagonismo de un Rivers que vino "para ganar partidos durante el tiempo que esté aquí" y por lo que está dando Sipahi, un jugador "de nivel de Euroliga por la altura, la visión de juego y capacidad defensiva y que lo único que le falta es meterla de fuera".

Por último, Juanma Rodríguez lanzó un mensaje para navegantes: "Vengo de muchos años en Málaga y la diferencia del apoyo de las instituciones al baloncesto es abismal, tanto por patrocinio como en nivel de instalaciones en sala. Sevilla está a la cola de España en cuanto a recintos cubiertos. Ahora me explico por qué aquí otros deportes de sala como balonmano, voleibol o fútbol sala no despegaban".

Niang estira durante una sesión de trabajo en San Pablo.