El Real Betis creyó en octubre que se quitaba el baloncesto de encima. A aquel club que salvó de la desaparición en 2016, pero que desde entonces no había gestionado con el suficiente acierto ni conseguido esa autofinanciación pretendida. La venta a las puertas del inicio de su segunda aventura en la LEB Oro al conglomerado mexicano XOY, un convenio más global con otros acuerdos, parecía la solución perfecta, pero todo saltó por los aires cuando en enero el CEO del grupo, Carlos Lazo, fue acusado de una estafa millonaria y todo empezó a caerse en un efecto dominó cuya última pieza es el Betis Baloncesto que ahora ve su futuro lleno de dudas.

Que la ola del tsunami que venía del país azteca acabaría llegando a Sevilla estaba claro y lo hizo la semana pasada, con cinco despidos (un fisioterapeuta, un preparador físico y tres trabajadores de oficina) además del corte de Wembi, un jugador querido en el vestuario al que Pablo Almazán y Joaquín Rodríguez dedicaron el último triunfo en Alicante.

Esta reestructuración viene acompañada de una serie de líneas de crédito, según confirmó Armando Guerrero, director deportivo, para asegurar el cobro de todos (plantilla, técnicos y trabajadores) hasta el final de temporada, aunque las dudas llegarán a parir del 30 de junio, cuando la lógica indica que el equipo volverá a estar bajo el paraguas presupuestario del Real Betis. En el contrato de venta si XOY no cumplía con un presupuesto mínimo la entidad heliopolitana recuperaría la propiedad y eso lo que debe pasar, aunque desde las oficinas del Benito Villamarín se mantiene un inquietante silencio pese a que su marca se relaciona con un presunto estafador y que Ramón Alarcón firma como el presidente del consejo de administración. 

A mitad de febrero, más de un mes después de que saltara el escándalo, desde el Real Betis se aseguró que se estaría "vigilante" ante la situación y ahora el club ha vuelto a lanzar un escueto comunicado desde su departamento de comunicación. "Hay una situación compleja con el propietario mexicano que estamos evaluando. El Real Betis Baloncesto SAD tiene presupuesto para acabar la temporada y seguirá siendo gestionado por sus ejecutivos", afirma la entidad.

El comunicado resulta curioso en este momento y genera incógnitas sobre la motivación del mismo. La situación con el propietario mexicano es tan compleja que es buscado por la justicia mexicana desde hace más de un mes, no ahora, y XOY lleva ya tiempo sin cumplir con los compromisos pactados. El Real Betis, sin embargo, no habla todavía nada sobre el futuro ni los planes que tiene cuando retome la propiedad del equipo de baloncesto cuya presidencia ostenta en los papeles Ramón Alarcón, que firmó como tal la convocatoria de junta de accionistas del pasado 29 de febrero.