No celebra goles. De hecho, no ha marcado ninguno en partido oficial desde que llegó en 2008 (sí en amistosos). Apenas corean su nombre en el estadio, aunque se siente querido por una afición que esta temporada ha aprendido a valorarlo. No levanta títulos, pero es el único de la plantilla actual del Sevilla que tiene dos en su palmarés, la Copa del Rey de 2010 y la Europa League del pasado año. Sin embargo, pocos a lo mejor habían caído en que, por su condición de primer capitán, le correspondería por derecho propio hacerlo en Varsovia en el hipotético caso de que el equipo de Unai Emery eliminara a la Fiorentina en semifinales y ganara también la final del próximo 27 de mayo.

Fernando Navarro entró el pasado miércoles en la historia dorada del Sevilla al disputar en Éibar su partido oficial número 280 en las siete temporadas que ha vestido su camiseta. El lateral catalán superó a Baby Acosta e igualó a Achúcarro y se encuentra en el exclusivo grupo de los 25 futbolistas de la historia del club que en más ocasiones han defendido su escudo, un gloriso ránking que lidera Pablo Blanco con 415 partidos. De hecho, Navarro iguala con la leyenda paraguaya en el puesto 23 de esta lista en la que están ilustres de toda la vida como Juan Arza (414), Marcelo Campanal (403), Busto (400), Lora (305), más recientes como Jiménez (413), Rafa Paz (386), Antonio Álvarez (370), Montero (323), Francisco (302) y más cercanos en el tiempo como Jesús Navas (393), Palop (295), Kanoute (293) o Renato (286).

El experimentado lateral, que debutó en Primera División en las filas del Barcelona y que llegó al Sevilla procedente del Mallorca, ha jugado una media de 40 partidos por temporada y aunque en algunas -como la pasada y en la presente- partía en teoría para el gran público como un jugador llamado a ocupar un segundo plano tras Alberto Moreno y Tremoulinas, los números han vuelto a darle la razón. En la pasada campaña, aún con el lateral del Cerro del Águila en la plantilla, sumó un total de 39 encuentros, repartidos entre los 24 de Liga, 13 de Europa League, 2 de Copa (el Sevilla cayó eliminado en la primera ronda). A ese habría que añadir uno de Supercopa de Europa ante el Real Madrid en Cardiff precisamente el día que en el que el canterano fue traspasado al Liverpool, aunque contabilizaría para la actual.

En ella, aún con 4 partidos de Liga por disputarse y, como mínimo, dos de competición europea, Fernando Navarro ha llegado a los 28 encuentros con la camiseta del Sevilla, una cifra que no se acerca a las de anteriores ejercicios (44 en la 08-09; 43 en la 09-10; 44 en la 10-11; 39 en la 11-12; 41 en la 12-13 y 40 en la 13-14), pero que no es nada despreciable.

Internacional absoluto con España, con la que debutó en junio de 2008 en un amistoso contra Estados Unidos y disputó luego su primer partido oficial frente a Grecia, Fernando Navarro fue integrante del grupo que conquistó el primer título de la selección en la Eurocopa ese mismo año en Alemania y Austria. Su ingreso en la disciplina sevillista se produciría inmediatamente después, marcando una época desde un talante discreto, siempre alejado de los focos, pero con una gran competitividad como mejor arma para ofrecer un rendimiento espectacular y seguro año a año.

Además, en su carrera futbolística tiene la anécdota de ser el jugador al que sustituyó Leo Messi en su debut con el Barcelona.

Cerca de cumplir 33 años (en junio), aún le queda cuerda para rato y mantiene contrato en vigor con el Sevilla hasta 2016, por lo que le resta una temporada más en la plantilla nervionense, lo que le permitirá, sin duda, aumentar más esta cifra y hacerse aún más leyenda de lo que ya es, aunque sea desde la perspectiva de la humildad, la discreción y el trabajo.