Muchas miras apuntan a Diego Perotti en esta pretemporada. Sus apariciones en algunos duelos como protagonista otorgan al argentino un rol creciente en la dinámica de un plantel que se quedó este verano sin alguno de sus máximos exponentes.

Llegaron Marko Marin, Vitolo, Jairo al tiempo que Rabello y Reyes también tratan de hacerse con una posición en los flancos ofensivos. Sin embargo, Perotti quiere agarrar esta temporada un puesto en el once de Emery y para ello buscará la regularidad que nunca encontró por culpa de las lesiones: "Desde que llegué al primer equipo, sano lo he jugado casi todo con los cinco técnicos. En la banda he competido con jugadores de mucho nombre y siempre estuve ahí. Las lesiones me lo han puesto difícil, pero me siento importante y querido en el equipo. Entrar a un vestuario y sentir que para los compañeros sigues siendo el mismo te genera alegría y es bueno para mí y para el grupo".

Su sonrisa de ayer en la rueda de prensa posterior al entrenamiento reflejaba el estado de ánimo de un soñador que ya no quiere recordar viejos momentos: "Cuando uno empieza a sentir el gusto de competir y entrenar sin problemas, lo que quiere es que no se termine. Me gustaría poder jugar la mayoría de los partidos, pero sé que hay una gran competencia y que eso es casi imposible. Ya el hecho de competir me hace sentir bien y es una alegría inmensa. Tuve la suerte de terminar la temporada jugando y ya eso es algo que no me ocurría desde hacía dos años. He podido volver como uno más, quitando las molestias del tobillo que no tenían nada que ver con lo anterior, pero soy cauto y voy con paciencia. Aún no estamos compitiendo semana a semana y quiero pasar esos primeros partidos sin festejar antes de tiempo". Sobre sus problemas, pretende olvidar antes que recordar: "Los médicos se ponen contentos también por mí, pero saben que hay que ir paso a paso".

El valor del argentino crece con la lesión de Reyes y la incógnita de Trochowski, otro jugador que puede moverse por la zona izquierda del ataque. Él sólo piensa en el Podgorica, más allá de un duelo bonito ante el Manchester United o un ilusionante arranque liguero: "El de Manchester es un partido muy lindo, pero lo que más importa y donde nos jugamos el dinero es en Podgorica. A los que les toque jugar el jueves tienen que dar el máximo y luego a los del viernes les va a venir muy bien ese amistoso en el que vamos a disfrutar, compartiendo la cancha con jugadores de nivel mundial. Será un buen momento para sacar conclusiones de lo que puede ser la Liga".

Perotti sabe que no será sencillo terminar el trabajo iniciado el pasado jueves para lograr el pase a la siguiente ronda: "Las sensaciones son buenas porque tenemos un resultado favorable, aunque no era un partido tan fácil como parecía. Hicimos el segundo gol en el minuto 80 y el tercero en el 90. De no haber sido así, habríamos viajado con un 1-0 complicado, pero vamos con seriedad y humildad, sabiendo que hay un resultado favorable pero nada hecho".

El argentino también hizo referencia a los objetivos de cara a la nueva campaña: "A pesar de la marcha de dos jugadores tan importantes, la afición está ilusionada por esos fichajes de proyección y otros de experiencia. Partes con la intención de dar la sorpresa, pero otros están un escalón por encima. Seguirles el ritmo es complicado, y si no tienes una regularidad, se alejan y agarrarlos es difícil". Son las diferencias con Real Madrid y Barcelona, aquéllos a los que Perotti se atreverá a retar de nuevo.