Julio Velázquez vuelve a estar en la picota. El entrenador del Betis, muy cuestionado tras la última derrota como visitante en Butarque ante el Leganés, salvó la cabeza en cualquier caso, se reafirmó en el puesto tras la victoria ante el Recreativo con un cambio en el estilo de juego yeste domingo volvió a las andadas con una nueva derrota a domicilio que apunta más allá de él mismo. 

Con todo, el análisis del técnico al término del encuentro fue escueto aunque dejó frases definitivas. "La primera parte fue maravillosa, el equipo se encontraba muy bien y tuvo la posibilidad de irse al descanso con un marcador más abultado de 0-3, 0-4 o 0-5. La primera parte fue muy buena y por eso no podemos perder como se ha perdido. Estamos jodidísimos porque hemos hecho mucho para ganar el partido y lo hemos perdido nosotros, no lo ha ganado Osasuna", resumió a la perfección el técnico castellano. 

El dircurso del entrenador se centró entonces en las jugadas a balón parado, determinantes para una derrota inesperada por algunos al descanso. "Que de manera repetida, en una situación que no teníamos problemas, te hagan tres goles te lleva a estar muy jodido, como lo estoy ahora", añadió el preparador de los heliopolitanos. 

Preguntado por su continuidad en el cargo, que no está garantizada pero tampoco descartada viendo lo que habita la planta noble, Velázquez se mostró contundente. "Mi puesto ahora mismo es secundario. Ahora emocionalmente es mejor no pensar mucho y ya mañana analizaremos los errores y sobre todo nos centraremos en el próximo partido", aconsejó el entrenador del Betis. 

Tras el partido perpetrado por el equipo y el coherente discurso del entrenador, la papeleta vuelve a estar en manos del consejo de administración, aunque todo hace indicar que Manuel Domínguez Platas, el presidente, se lavará de nuevo las manos, como lleva haciendo desde que lo colocaron ahí, y dejará la decisión a Alexis Trujillo y Chuti Molina, quienes no se atreven a relevar a Velázquez por alguien que no sea Mel porque saben que la empresa estaría condenada al fracaso casi de antemano. 

Platas prefiere esperar a la Junta de Accionistas para huir y dejar el marrón a su sucesor, pero también hay consejeros que piensan que la situación deportiva necesita urgentemente del bisturí y se hallarían incluso dispuestos a un diáloga con Mel como única salida a la peor crisis de la entidad en años, con el equipo sin norte y a los mismos puntos del descenso que del líder y un entrenador incapaz de encontrar soluciones.

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