Rafa Nadal acudió a su cita con los cuartos de final de Roland Garros, que también alcanzaron Alejandro Davidovich y Paula Badosa, lo que supone el mejor balance español en ese estado de la competición desde 2015.

El número 3 del mundo, que busca su decimocuarto título en París para totalizar 21 grandes, se deshizo por la vía rápida del joven italiano Jannik Sinner, por 7-5, 6-3 y 6-0, un tenista de 19 años y 19 del mundo al que ya había ganado la pasada edición en cuartos de final.

Como si el camino de la conquista del título 14 siguiera la estela del 13, Nadal se medirá en cuartos contra el argentino Diego Schwartzman, al que derrotó en 2020 en semifinales.

Son los dos únicos tenistas que se han colado entre los ocho mejores sin ceder un set, porque el serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, que no lo había perdido hasta ahora, se dejó 2 contra el joven italiano Lorenzo Musetti, de 19 años.

Nadal encadena ya 35 desde que perdió el último en la arcilla francesa en la final de 2019 contra el austríaco Dominic Thiem, camino de su duodécimo triunfo. Está a tres de su mejor racha, lograda entre 2016 y 2018, y a seis de los 41 que consiguió el sueco Bjon Borg entre 1979 y 1981, récord absoluto en todos los grandes.

Ante Sinner, un tenista que tiene un enorme futuro, Nadal completó un partido a rachas, con momentos muy brillantes combinados con otros en los que cedió la iniciativa a su rival. Pero siempre con la impresión de controlar el duelo, que no pareció poder escapársele en ningún momento.

Como el año pasado, como en su segundo duelo este mismo curso en Roma, Sinner fue de más a menos, para acabar concediendo un set en blanco.

10-1 entre Nadal y Schwartzman

Nadal ahora tendrá enfrente a otro viejo conocido. Y amigo. El argentino Schwartzman, una de sus víctimas favoritas, que el año pasado logró ganarle un duelo, el único en diez tentativas, en cuartos de final de Roma.

Fue en la temporada cumbre del argentino, que se presentó luego en París con confianza y alcanzó por vez primera las semifinales de un Grand Slam, en las que se topó de nuevo con Nadal, que esa vez no le dio opciones.

Ahora lo afrontará una fase antes camino de una semifinal en la que todas las apuestas aseguran que se cruzará con Djokovic, aunque tras el susto de este lunes el serbio tendrá que medirse a un italiano más sólido, Matteo Berrettini, 9 del mundo, clasificado a cuartos sin jugar por la retirada del suizo Roger Federer. El pase a semifinales lo buscarán este martes Davidovich y Badosa, que nunca antes habían estado en cuartos.

El malagueño, ganador júnior en Wimbledon en 2017, una de las sensaciones del torneo por su fogoso tenis, tendrá la tarea más compleja, doblegar al número 6 del mundo, el alemán Alexander Zverev, de 24 años, que en su tercer paso por los cuartos persigue sus primeras semifinales.

Davidovich, que acaba de cumplir 22 años, está mostrando un juego elevado y todo es posible a estas alturas de la competición, aunque el germano partirá como favorito indiscutible ante un rival que hasta ahora no había superado los octavos. Un escenario similar al que afronta Badosa, de 23 años, aupada a cuartos por vez primera en su carrera.

La jerarquía está a favor de la española, 35 del mundo, que se medirá a la eslovena Tamara Zidansek, 85 del ránking a los 23 años, que en sus ocho Grand Slam anteriores solo había ganado tres partidos. En esta ocasión suma ya cuatro victorias y amenaza a una Badosa que sueña en grande en un cuadro femenino plagado de derrotas de las favoritas.