Rugby | Liga Iberdrola

El sinsentido de la Federación

  • La Comisión Delegada decide que la División de Honor femenina debe continuar mientras da por finalizada la inacabada categoría masculina

  • El Corteva Cocos clama contra la resolución

Mariola Rus conversa con sus jugadoras.

Mariola Rus conversa con sus jugadoras. / Juan Carlos Ozagón

Difícil comprender la decisión de la Comisión Delegada de la Federación Española de Rugby (FER). La resolución del organismo confirmó que la División de Honor, competición masculina, se daba por acabada, con campeón y descensos incluidos, cuando todavía quedaban por disputarse cinco jornadas de la fase regular, con el primero y segundo separados por dos puntos y un duelo directo entre ellos pendiente, además de los play off. Una decisión tan valiente como incongruente, sobre todo a la vista de la resolución que el organismo tomó con respecto a la Liga Iberdrola, la categoría femenina, que se reanudará cuando las autoridades sanitarias así lo consideren oportuno. Atrás queda una fase regular en la que el Corteva Cocos acabó como primero y que clama contra una decisión que consideran a todas luces "incoherente". Y sus argumentos, sobre la mesa.

El club sevillano, que debió disputar las semifinales en casa ante el Sanse Scrum a mediados de marzo, no entiende esa disparidad de criterios en la toma de decisiones. "No entendemos esa diferencia a la hora de tomar decisiones. Incoherente es la palabra. También sentimos tristeza por ser nuestra propia federación la que nos trata así. Vamos a inundar las redes sociales con todas las muestras de apoyo recibidas desde que conocimos la noticia", explicó Mariola Rus, presidenta del Corteva Cocos. "El rugby lleva treinta años peleando por la igualdad en el deporte", apuntilló.

Uno de los puntos que más escama al club de esta decisión de la Federación es la falta de detalles con resepecto al retorno de la competición. Esa falta de información impide a los sevillanos planificar los que serán los partidos más importantes de su historia, ya que todas sus jugadoras extranjeras han retornado a sus países de origen. Por lo cual, la competición estaría totalmente desvirtuada para los partidos restantes.

Un hándicap muy difícil de solucionar. "No estamos contentos con esta situación. Evidentemente, no era lo que esperábamos. Siempre hemos pedido que la competición acabase, que no se jugara. Volver en estas condiciones es absurdo. Haber tomado una decisión diferente en la categoría masculina que en la femenina es una absoluta falta de coherencia", relata Manuel Sobrino, entrenador del Corteva Cocos.

La decisión revolucionó el seno del equipo. Las componentes del conjunto sevillano están muy molestas con la resolución, mientras que todos los estamentos del club confían en que la Federación recapacite tras esta medida. "Es incoherente y absurdo pretender que un grupo humano pueda reencontrarse en un futuro para disputar un evento deportivo sin atender a las circunstancias de cada individuo. De este modo, se dejaría a la competición femenina huérfana de una solución a diferencia de lo decidido en el resto de competiciones", esgrimió el club a través de un comunicado, firmado por Mariola Rus, en el que se insta al organismo a que reconsidere esta incomprensible decisión.

"Sinceramente, mantengo la esperanza", dice Sobrino al ser cuestionado por la posibilidad de que la FER reaccione. "Es un sinsentido. Esta decisión no tiene ni pies ni cabezas. Con esto parece que queremos quedar campeones, pero no. Queremos que la temporada se dé por terminada, no se tiene que jugar más", añadió el técnico sevillano, visiblemente contrariado con una resolución difícilmente comprensible para muchos. El cuándo y el cómo volverá la competición preocupa, pero sobre todo el por qué resulta difícil de entender. Y las Cocos, como gran parte del rugby sevillano, esperan respuestas.

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