Por la puerta grande. El Sevilla Femenino avanzó hasta la siguiente ronda de la Copa de la Reina con una victoria sin paliativos frente al todopoderoso Levante, uno de los equipos que se ha asentado entre los mejores del país, y que quedó neutralizado por la ilusión, el empuje y, por supuesto, el fútbol del equipo de Cristian Toro, que antes de los 20 minutos del partido ya se veía con una renta importante (2-0) en el marcador.

Muchas cosas hizo bien el equipo blanquirrojo para llevarse la eliminatoria a pesar de que el favoritismo caía del bando rival. Cata Col estuvo inmensa entre los palos. Y con una mano salvadora suya en un lanzamiento muy cercano de Esther, a los pocos instantes de juego, demostró que iba a ser una auténtica misión imposible batirla en el día de ayer, como así se corroboró a pesar de que las de María Pry lo intentaron de casi cualquier forma. Pero cuando no era la guardameta, Cometti, Maite o Lucía actuaban como infranqueable muro.

Consistentes y sólidas atrás, arriba las pupilas de Cristian Toro demostraron un apetito voraz para quedarse con la eliminatoria. Toni Payne se convirtió en un tormento para las defensoras forasteras con su velocidad y junto a Karpova en la zona ofensiva, formaron una dupla insalvable para las granotas. De las botas de la jugadora norteamericana llegó el primer gol del partido. Metió una marcha más para escapar de su par y colocó un balón a la frontal del área, donde apareció Nagore Calderón para mandar la pelota a la escuadra. Era el minuto 13 de un partido que se ponía de cara.

Cuatro más tardaron las locales en ampliar la renta. En esta ocasión fue Karpova la que aprovechó una jugada cocinada por Toni Payne y Amparito, con un pase a la espalda de la defensa de ésta última, que la atacante rusa cazaba para batir con la bola entre las piernas a Paraluta.

Con el duelo favorable al equipo local, las levantinas insistieron buscando recortar distancias. Alharilla intentó sorprender con un centro-chut desde la derecha que Cata Col acertó a despejar por encima del partido.

La eliminatoria quedó sentenciada después del paso por los vestuarios. Karpova logró superar a Rocío Gálvez hasta internarse en el área. Levantó la cabeza y vio como desde atrás entraba Zdunek, quien mandó la bola con un sutil toque a la escuadra. Un 3-0 para las sevillistas que las mete en el bombo de los cuartos de final tras eliminar a un coco.