Airbus Military decidió en mayo trasladar de Sevilla a Toulouse (Francia) los vuelos de prueba del segundo prototipo del avión A400M al no tener garantizados ni disponibles controladores aéreos propios que les permite poder efectuar los test sin entrar en conflicto con el tráfico aéreo civil.

"Este avión efectúa maniobras especiales, por lo que es necesario tener controladores específicos para evitar que entre en conflicto con el tráfico civil", explicaron fuentes de la compañía.

Éstas precisaron que hasta ahora Aena designaba a uno o dos controladores específicos para esta maniobra, pero apuntaron que "con la entrada en vigor del real decreto sobre condiciones laborales de los controladores aéreos no nos pueden asignar un controlador específico".

Por otro lado, Airbus celebró ayer la venta de 32 aviones A380 a la aerolínea Emirates, el mayor de sus clientes con 58 pedidos en su haber. El encargo tiene, de acuerdo con la lista de precios, un valor aproximado de 11.000 millones de euros.

En el mismo día la compañía aérea brasileña TAM Airlines anunció el pedido de 20 aviones A320 y cinco A350-900 de Airbus. Si se toma como referencia el precio medio del catálogo, este contrato representa unos 2.900 millones de dólares. Ambas ventas se produjeron en el marco del salón aeronáutico ILA de Berlín.