El BCE subirá los tipos en julio en 25 puntos básicos y de nuevo en septiembre

Se toma como medida para frenar la fuerte inflación por la guerra en Ucrania

No se ha especificado en cuánto subirá en el mes de septiembre

Lagarde adelanta una "senda gradual y sostenida" de subidas de tipos mas allá de septiembre

Christine Lagarde, presidenta del BCE, a finales del año pasado en rueda de prensa / Ronald Wittek / Efe
R.D.

09 de junio 2022 - 15:11

Después de no haber subido el precio del dinero desde hace once años, el Banco Central Europeo (BCE) despega en julio con una subida de sus tipos de interés moderada de 25 puntos básicos, a la que seguirá otra en septiembre, cuya cuantía no ha decidido todavía.

El BCE sube el precio del dinero

El Consejo de Gobierno del BCE decidió este jueves en Amsterdam comenzar a subir los tipos de interés moderadamente en su reunión del 21 de julio para frenar la fuerte subida de la inflación por la guerra en Ucrania.

El BCE volverá a incrementar el precio del dinero en septiembre... ¿En cuánto? No está claro todavía, dependerá de los datos de inflación, podría ser en 50 puntos básicos.

"Si las perspectivas de inflación a medio plazo persisten o se deterioran, un incremento mayor será apropiado en la reunión de septiembre", indicó la entidad en un comunicado.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, explicó en una rueda de prensa en Amsterdam, que se pudo seguir también de forma virtual, que la decisión fue tomada por unanimidad. "Estamos en un viaje y este es un paso importante en este viaje", comentó.

Un alza de los tipos de interés reduce la demanda y, por lo tanto, los precios. El objetivo es controlar la subida de la inflación sin llegar a generar una recesión, algo que el BCE descarta que vaya ocurrir.

Pedir un préstamo sale más caro a los consumidores, empresas, inversores y gobiernos, lo que provoca que se reduzca la demanda.

De hecho, antes de que el BCE suba sus intereses, ya han incrementado con fuerza los tipos de interés y las primas de riesgo en países como Italia y España, que están muy endeudados.

Lagarde dijo que quieren observar cómo reacciona el mercado y que por ello no han decidido un aumento mayor de las tasas de cara a septiembre.

Ahora el tipo de interés de las subastas semanales está en el 0%, el de la facilidad marginal de crédito en el 0,25% y el de la facilidad de depósito en el -0,50%.

La facilidad de depósito es el tipo de interés con el que el BCE tradicionalmente remuneraba a los bancos sus depósitos a un día en la entidad, pero desde hace ocho años comenzó a cobrarles por el exceso de reservas para animarles a invertir en la economía real y evitar que sólo depositen el dinero en el BCE.

Tras ocho años en territorio negativo, la facilidad de depósito volverá al terreno positivo el tercer trimestre.

El tipo de interés de sus operaciones de refinanciación principales está en el 0% desde hace más de seis años.

Lagarde ha dicho que en julio van a aumentar los tres tipos de interés y que todavía no han decidido qué hacer en septiembre.

En septiembre continuará el despegue

Lagarde también consideró que a partir de septiembre serán necesarios más incrementos del precio del dinero. "A partir de septiembre será apropiado un ritmo gradual, pero sostenido, de más incrementos de los tipos de interés", según el BCE.

El BCE reconoce que las presiones inflacionistas se han "ampliado e intensificado" y que los precios de muchos bienes y servicios han aumentado fuertemente, sobre todo la energía y los alimentos, por la guerra en Ucrania.

Por ello, el BCE ha revisado significativamente al alza sus pronósticos de inflación y a la baja los de crecimiento para la zona del euro.

El BCE prevé este año una inflación del 6,8% (5,1 % pronosticado en marzo) y un crecimiento del 2,8% (3,7 % previsto en marzo).

La inflación remitirá hasta el 3,5% en 2023 (2,1% en marzo) y el 2,1% en 2024 (1,9%).

El BCE pronostica ahora un crecimiento en 2023 del 2,1% (2,8% en marzo) y en 2024 del 2,1 % ( 1,6%).

Fin de las compras de deuda

Como ya había dicho antes, el BCE concluirá primero las compras de deuda antes de comenzar a subir los tipos de interés en julio.

El programa de compras de activos (APP) concluirá el 1 de julio y el BCE reinvertirá íntegramente el principal de los valores adquiridos que vayan venciendo durante un período prolongado tras comenzar a subir los tipos de interés.

Asimismo va a reinvertir el dinero de los bonos adquiridos con el programa de expansión cuantitativa que aplicó para afrontar la crisis por la pandemia hasta, al menos, finales de 2024.

Al reinvertir el dinero de los bonos el BCE se mantiene en el mercado y de este modo presiona a la baja los tipos de interés, pero puede que las reinversiones no sean suficientes para impedir que suban los tipos de interés en algunos países más que en otros.

"Estamos comprometidos para evitar los riesgos de fragmentación", que impidan que la política monetaria se transmita de forma similar en todos los países y que por ello en algunos suban más los intereses que en otros, dijo Lagarde, de momento.

Si el BCE está dispuesto a aplicar nuevas medidas que lo eviten, está por ver.

.

Lagarde adelanta una "senda gradual y sostenida" de subidas de tipos mas allá de septiembre

La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha subrayado este jueves que el anuncio de una subida de los tipos de interés de 25 puntos básicos en julio y de otra adicional en septiembre no es un movimiento aislado, sino el primer paso en una senda "gradual y sostenida" de incrementos más allá de septiembre para combatir una tasa de inflación "indeseablemente" elevada.

"Más allá de septiembre, sobre la base de nuestra evaluación actual, anticipamos que será apropiado una senda gradual pero sostenida de aumentos adicionales en las tasas de interés, ha anunciado la francesa, añadiendo que el ritmo al que el BCE ajustará su política monetaria dependerá de los datos entrantes y de cómo evalúe la evolución de la inflación a mediano plazo.

"Hemos identificado una senda, no un movimiento particular, sino una serie de movimientos en los próximos meses", ha explicado Lagarde, para quien la decisión del Consejo de Gobierno del BCE "no es un paso, sino un viaje que empezó el pasado diciembre" y que ha ido colocando a la entidad en posición de dejar atrás sus medidas no convencionales.

De este modo, Lagarde ha anticipado que, en septiembre, la calibración de la subida prevista dependerá de las perspectivas de inflación a medio plazo, añadiendo que si estas se mantienen en el 2,1% para 2024 o empeoran, la subida de tipos será mayor de los 25 puntos básicos de julio. "La flexibilidad seguirá siendo un elemento de la política monetaria", ha aclarado.

En cualquier caso, la presidenta de BCE ha defendido que el Consejo de Gobierno quiere asegurarse de que la inflación retorna al objetivo del 2% en el medio plazo, después de admitir que las presiones inflacionistas se han intensificado y ampliado.

En este sentido, Lagarde ha señalado el impacto de la invasión rusa de Ucrania en la confianza, la inflación y el crecimiento, mientras que la situación de la pandemia en China ha empeorado los 'cuellos de botella', aunque ha advertido de que las subidas salariales han comenzado a cobrar impulso en la eurozona.

No tolerará la fragmentación

Por otro lado, la francesa ha insistido en que el BCE cuenta con herramientas, así como con la experiencia y la capacidad de dotarse de nuevos instrumentos si fuera necesario, para combatir la fragmentación de los costes de financiación en la zona euro que impidiese la correcta transmisión de la política monetaria.

"Debemos contar con la correcta posición monetaria pero también tenemos que asegurarnos de que se transmite a toda la zona euro y para eso tenemos que asegurarnos que no hay fragmentación", ha señalado Lagarde.

A este respecto, la presidenta del BCE ha recordado que la institución dispone de instrumentos como la capacidad de reinversión de la deuda adquirida bajo el programa antipandemia (PEPP), que será reinvertida con total flexibilidad de tiempo y jurisdicciones.

"Como ya hemos demostrado, desplegaremos otros instrumentos existentes o aquellos necesarios para evitar que la fragmentación impida la adecuada transmisión de la política monetaria", ha añadido.

Sobre esta cuestión, Lagarde no ha querido entrar en detalles, señalando que no hay un nivel específico de las primas de riesgo o de los rendimientos de la deuda que pudiera desencadenar la intervención del banco central. "No toleraremos una fragmentación que impida la transmisión de la política monetaria", ha concluido.

1 Comentario

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último