La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) ha advertido este viernes de que el déficit hídrico crecerá en todas las cuencas andaluzas, salvo la del Mediterráneo, si no se toman medidas añadidas a la actual planificación hidrológica.

Así lo indica el informe presentado este viernes y realizado en colaboración con San Telmo Business School, que señala que hasta el año 2039 la insuficiencia de recursos en las cuencas del Guadalquivir, Guadalete-Barbate y Tinto-Odiel-Piedras se agravará en un 65 %.

De esta forma el desajuste entre la oferta y la demanda pasaría de 226 a 382 hm3, como consecuencia de la incidencia del cambio climático y el incremento de la demanda ambiental.

Según datos oficiales de la planificación hidrológica de las cuencas andaluzas, sólo la mediterránea logrará revertir su déficit actual de 183 hm3 gracias a las inversiones en infraestructuras de desalación y regeneración, que permitirán la entrada de 200 hm3 que compensará el descenso de recursos superficiales y subterráneos.

Feragua asegura que "especialmente amenazante" es la situación en la Cuenca del Guadalquivir, donde la proyección del organismo de cuenca es que el déficit hídrico casi se duplique y donde el potencial de aplicación de los recursos complementarios (desalación y regeneración) es mucho menor que en las cuencas litorales.

"Una situación que preocupa, y mucho al sector agroalimentario, muy dependiente del regadío, cuya sostenibilidad podría verse seriamente amenazada por la falta de garantía de agua y, con ella, algunas de las fortalezas y mayores oportunidades de futuro para la economía andaluza", asegura el informe.

El estudio ha sido presentado por Francisco Carrasco, responsable técnico de Feragua, durante una jornada sobre el agua y la agricultura.

Los regantes han recordado que el sector agroalimentario andaluz es "el más grande de España" y supone casi 19.440 millones de euros, además de representar el 21 % del empleo del sector en todo el país y un 16 % de la ocupación total de Andalucía, donde genera casi 500.000 empleos.

Feragua ha señalado que la falta de agua amenaza no solo las ventas de productos agrícolas andaluces, que en 2022 superaron por primera vez los 14.000 millones, sino, "de forma inevitable", el superávit comercial de Andalucía (de 7.000 millones de euros en 2022).

Por ello el estudio advierte de la necesidad de inversiones que corrijan esta "adversa" proyección hidrológica de futuro y apuesta por "avanzar en un mix hídrico, con recursos de diferentes orígenes (superficiales, subterráneos, trasvasados y de la regeneración y desalación) suficientes y óptimamente integrados para atender las demandas".

Apuesta además por tener en cuenta que los recursos complementarios tienen mayor potencial de aplicación en el litoral y que las soluciones para las cuencas de interior pasan por infraestructuras como presas y balsas de riego, que aumenten la capacidad de regulación.