Reflexión. Ésa es la invitación que lanzó en Córdoba el consejero de Turismo y Comercio de la Junta de Andalucía, Rafael Rodríguez, sobre los precios de los establecimientos hoteleros, una situación que se viene repitiendo en el caso de la capital durante el mes de mayo, que es el de mayor afluencia de visitantes. El dirigente dejó claro que no es la misión del Gobierno andaluz un control de los precios de los hospedajes porque "no tenemos competencias", pero sí "queremos trasladar una reflexión al sector hotelero para que en estos momentos seamos prudentes a la hora de adecuar los precios a la nueva realidad turística". No obstante, el consejero insistió en que es el propio sector el que tiene que regularse y lograr una rentabilidad "que ha estado muy menguada" en los últimos años.

Además, recordó que uno de los datos que "nos ha llamado la atención" del informe turístico sobre la Semana Santa ha sido que la mayoría de los visitantes -un 90%- considera que la relación calidad-precio en Andalucía es buena o muy buena, por lo que Rodríguez abogó por mantener esa línea que el cliente se muestre satisfecho, pese a reconocer que la rentabilidad hotelera "ha estado estancada" a causa de la crisis económica.

Esta llamada al análisis del consejero llega después de que en el caso de la ciudad de Córdoba se lleguen incluso a triplicar los precios de los hoteles durante los fines de semana del mes de mayo. Rafael Rodríguez estuvo en la capital para participar en la constitución de la mesa provincial contra la competencia desleal y la clandestinidad en el sector turístico, un órgano en el que están representados instituciones y agentes económicos y sociales con el fin de coordinar actuaciones de control e inspección para favorecer la economía productiva en un marco de legalidad. Sobre la situación de este tipo de establecimientos, el dirigente reconoció que "es complicado" ofrecer una cifra exacta, ya que se trata de economía sumergida, pero sí apuntó que entre el 15 y el 20% de la oferta de hospedaje que existe en la actualidad se encuentra en situación de "ilegalidad o alegalidad". No obstante, Rodríguez matizó que muchos de los responsables de estos negocios quieren regulariza la situación y que por ello se está preparando un decreto en ese sentido. Añadió que la intención del Gobierno andaluz es que "aflore" toda esa oferta.

Esta mesa, que surge según dijo de la petición del propio sector, ya está en marcha en otras provincias de la comunidad con la participación de todas las administraciones, si bien en el caso de Córdoba la Subdelegación del Gobierno ha rechazado tomar parte en la misma. Así, Rodríguez abandonó su discurso conciliador de otras ocasiones para criticar a la Subdelegación y "a una parte del PP" que dijo que actúa con "sectarismo". El consejero dijo no entender "cómo lo que vale para Sevilla, Málaga o Granada no vale para Córdoba" y reconoció que esta mesa "tendrá dificultades de operatividad" sin la participación de la Subdelegación y de entidades como la Policía Nacional, la Guardia Civil o la Inspección de Hacienda. La Diputación de Córdoba tampoco asistió.

Pese a esa objeción, el responsable de Turismo y Comercio mostró su confianza en que tanto el Ayuntamiento de Córdoba -que sí estuvo representado- como la propia Administración autonómica "haremos lo que esté en nuestra mano" para ayudar a los empresarios y asociaciones del sector en sus demandas para acabar con la clandestinidad en esta actividad económica.

La Subdelegación del Gobierno en Córdoba lanzó un comunicado en el que Juan José Primo Jurado declaró que lamentan "que el consejero de Turismo busque la confrontación y confundir a la sociedad cordobesa en este terreno". Añadió además que "el Gobierno central tiene creada en Córdoba una Mesa Antifraude en la que participan los agentes con competencias en este terreno" y aseguró que "es falso que en otras provincias hayan participado las Subdelegaciones del Gobierno en dichas mesas".

Mientras, el titular andaluz de Turismo avanzó que la mesa contra la clandestinidad en Córdoba, cuyo formato espera se extienda al resto de provincias andaluzas, celebrará su próxima reunión en el plazo de un mes y que ese próximo encuentro "tendrá un carácter operativo, con un orden del día que será elaborado por los propios agentes sociales, de forma que trasladen a la Delegación Territorial los temas y propuestas para ser debatidos". Rafael Rodríguez recordó que desde el Gobierno andaluz "se está trabajando para introducir elementos legislativos nuevos que permitan no perseguir, sancionar ni recaudar, sino que toda la actividad sumergida en el sector aflore y se desarrolle en un marco de legalidad y en condiciones de igualdad". La creación de la mesa contra la clandestinidad en Córdoba busca "defender el interés general y la solidaridad fiscal" y "posibilitar una especie de ventanilla única a la hora de coordinar todas las acciones y dispositivos de inspección para combatir la ilegalidad y la precariedad".