Los Presupuestos Generales del Estado, PGE, de este 2023 llegan con nuevas medidas para todos. La primera de ellas la entrada en vigor de la rebaja de IRPF. Esta medida no pudo entrar en vigor antes ya que Hacienda,  según ha explicado la Asociación Española de Asesores Fiscales (Aedaf) a La Vanguardia, ha tenido que reajustar sus algoritmos de retenciones para que concuerde con esta bajada.

Este cambio en los presupuestos busca beneficiar a los trabajadores con un nivel adquisitivo más bajo, algo muy necesario en una época como la actual en la que la inflación sigue siendo bastante alta. Este tipo de rentas serán las que más aprovechen este ahorro, ya que las rentas más altas solo ganaran algunos euros más de lo que ganaban antes.

Si tu salario bruto anual es de entre 15.000 y 21.000 euros pagarás menos IRPF. Todos los trabajadores que se encuentren en esta horquilla podrán notas la reducción de este impuesto a las personas físicas. Hasta este mes de febrero, las personas que disfrutaban de una reducción fiscal eran las que tenían rentas entre 15.000 y 18.000 euros brutos al año.

Esta nueva cifra de 21.000 euros ha sido escogida por el ejecutivo de Pedro Sánchez al tratarse del salario mediano en el país. Por ello, esta medida debe beneficiar a la mitad de los contribuyentes a la Seguridad Social. Hacienda explica que “esta medida supone aplicar una rebaja para el 50% de trabajadores, que lograrán un ahorro de 1.881 millones de euros”

Por otro lado, siendo otra ventaja, es que el mínimo de tributación se ha elevado hasta alcanzar los 15.000 euros, anteriormente situado en 14.000 euros brutos anuales. Por lo que solo tendrás que realizar la declaración de la renta si alcanzas, o superas, esta cantidad con más de dos pagadores.  Mientras que en el caso de ser asalariado con hijos que presenta declaración conjunta, el mínimo pasa de los 18.000 euros a los 19.000 debido al incremento de la reducción de los rendimientos del trabajo.

No solo las rentas de hasta 21.000 euros brutos anuales disfrutaran de este nuevo ajuste. Los trabajadores que cobren entre 22.000 y 35.200 euros al año de forma bruta podrán tener beneficios de la bajada del IRPF.

El sindicato de técnicos de Hacienda ha realizado un informe con base de las nuevas retenciones dejando un ejemplo claro, “un contribuyente con un sueldo anual bruto de 20.000, 20.500, 21.000, 21.500 o 22.000 euros, dos hijos y que haga la declaración conjunta con su cónyuge (un solo ingreso en el hogar) ingresará 691,01 euros más al año por las retenciones de IRPF que se le dejarán de aplicar".