l Ni el pequeño embolsamiento frío procedente del Estrecho, ni el moderado descenso de las temperaturas que se ha registrado en los últimos días han impedido que los almerienses lleven a las calles de la ciudad sus ganas de vivir intensamente la Navidad. El mercado artesanal instalado en la Rambla de la capital ha experimentado unos días de éxito con una importante presencia de ciudadanos, algunos de otros municipios, en la mayoría de los puestos. Y no es el único ejemplo de la importancia de esta festividad para los almerienses. Las actividades de ocio programadas para los niños a lo largo de los barrios de la ciudad también han vivido una gran afluencia de pequeños con sus padres, al igual que buena parte de las citas culturales y deportivas como la San Silvestre de Almería.