Cuatro inmigrantes lograron ayer saltar la valla fronteriza en Melilla, de los que uno de ellos fue detenido por herir a dos guardias civiles con mordeduras y arañazos, de un grupo de unos 400 que había intentado acceder al vallado entre España y Marruecos. Según la Delegación del Gobierno en Melilla, hacia las 06:10 se detectó a una aglomeración de personas en la zona de Beni-Enzar, el principal paso fronterizo entre ambos países en Melilla.

La Guardia Civil reforzó su presencia en la valla y pidió apoyo a la Policía Nacional. "El grueso del grupo fue controlado por Marruecos aunque unos 60 logran aproximarse al vallado y cuatro logran entrar tras superar el dispositivo antintrusión", indicó la Delegación del Gobierno.