Tras comunicar el diestro Juan Ortega que no asistiría a su cita con el altar el pasado sábado en Jerez su pareja de estos diez años, la cardióloga Carmen Otte, no salía de su asombro, un impacto para toda la familia.

Desde que el diestro le comunicó por teléfono la noticia desde su habitación en el Hotel Bodega Tío Pepe la doctora del hospital sevillano Virgen de Valme no sale del domicilio de sus padres, donde acudió tras la fiesta preboda del viernes y aguardaba vestirse de novia y salir del brazo del padrino, su padre. Ortega por suparte abandonó ese día Jerez y se dirigió a su domicilio en Sevilla, donde se encuentra reflexionando tras lo su cedido.

El diestro también comunicó a la familia de su novia que se haría cargo de los gastos, como el frustrado convite en las Bodegas González Byass, el viaje de luna de miel y otros gastos afectados por la cancelación inesperada de este sábado.

Por otra, una muestra de cómo reaccionaron los invitados tras quedarse también plantados sin la boda en Jerez este sábado fue la agenda de Juan del Val. Junto a Curro Romero y Carmen Tello, entre otros, era uno del medio millar de asistentes a la iglesia de Santiago que al mediodía conocieron la anulación para pasmo general. Del Val, veterano cronista taurino además de escritor y tertuliano en la tele, se quedó compuesto sin la celebración y decidió permanecer en Jerez y aprovechar la estancia para vivir una zambomba flamenca en compañía de varios amigos. Este domingo, cuando acudía al programa de su esposa, Nuria Roca, La Roca, ella ironizaba diciéndole “dichosos los ojos que te ven”, ya que pensaba que su marido hubiera adelantado su marcha a Madrid.

Él prefirió apurar el sábado en Jerez, sin boda y sin convite, y se marchó de juerga navideña. En el espacio de su mujer en La Sexta manifestó toda la empatía con la novia pero entendiendo que era mejor una suspensión que no un divorcio rápido posterior.