Con más de 880K seguidores en Instagram, Carla Barber es en la actualidad una de las mujeres más influyentes en el ámbito de la cirugía estética en España. Y es que, además de médica, esta mujer de 31 años es una modelo que optó por el título de Miss Mundo 2011 y ganó los certámenes de Miss Las Palmas 2010 y Miss España 2015.

Recientemente, Carla Barber, originaria de Canarias, ha publicado un vídeo en su página oficial de Instagram en la que narraba cómo ha sido diagnosticada con el Síndrome de Brugada, un trastorno del ritmo cardíaco que es poco frecuente pero, a la vez, potencialmente mortal. Los estudios elaborados hasta el momento sobre dicha enfermedad apuntan a que, en ocasiones, es heredado.

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"Hace justo un mes que me dieron la noticia de que tenía una enfermedad del corazón", comienza la modelo a explicar en su perfil de Instagram. Esta cardiopatía, tal y como expone, puede llegar a producir muerte súbita. "Es una enfermedad que no tiene tratamiento", lamenta. 

Ante los hechos, la modelo ha querido agradecer la atención de los médicos que la han tratado: "Quiero dar las gracias al cardiólogo Paco Torres, que me ha hecho estas pruebas para detectarme esta enfermedad, y al doctor Pedro Brugada, con el que estuve reunida una vez me diagnosticaron la enfermedad".

"Ha sido duro. Es un shock que te digan que de pronto tienes un tres por ciento de posibilidad al año de morir de muerte súbita en los próximos diez años", afirmó Carla Barber, quien posee una edad demasiado temprana para recibir una noticia semejante. 

¿Qué es el Síndrome de Brugada?

Como se adelantaba previamente, se trata de un trastorno cardíaco que produce en las personas que lo padecen y sufren un mayor riesgo de tener ritmos cardíacos irregulares que comienzan en las cámaras inferiores del corazón (ventrículos).

Tal y como adelantaba la especialista en medicina estética, no existe un tratamiento como tal para eliminar la enfermedad, ya que los tratamientos del síndrome de Brugada incluyen medidas preventivas como evitar el agravamiento de los medicamentos y reducir la fiebre. Cuando sea necesario, el tratamiento también puede incluir un dispositivo médico llamado desfibrilador cardioversor implantable.

Muchas personas con el síndrome de Brugada no saben que tienen la afección ya que, muy a menudo, no provoca ningún síntoma notable. Algunos de sus signos pueden ser mareos, desmayo, jadeos o respiración dificultosa (particularmente a la noche), latidos irregulares o palpitaciones, latidos del corazón extremadamente rápido y caótico o convulsiones.

No obstante, el signo más importante del síndrome de Brugada es un resultado anormal en un electrocardiograma (ECG), una prueba que mide la actividad eléctrica del corazón.