Una gaditana de 21 años dice ser hija de Alejandro Sanz

La joven ha presentado una demanda de paternidad en los juzgados de Cádiz y le reclama que se someta a unas pruebas de ADN. Falta por conocer la reacción del artista y de sus abogados.

Tres modelos lucen diseños de la firma con plumas, flecos, pieles y bordados muy elaborados.
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Fátima Díaz

08 de julio 2011 - 01:00

A punto de ver la cara a su tercer hijo, fruto de su relación con su antigua road manager, Raquel Perera, a Alejandro Sanz le ha salido una nueva hija secreta. Así lo cuenta la revista Pronto, que informa esta semana de la demanda de paternidad presentada por una gaditana llamada Isabel Vázquez Berea, de 21 años, joven que ha decidido iniciar un proceso legal para que el cantante, cuyo verdadero nombre es Alejandro Sánchez Pizarro, la reconozca como hija suya.

Fue el pasado día 23 de junio cuando esta chica, nacida de la supuesta relación sentimental entre el artista y una gaditana llamada Charo Berea entre 1987 y 1989, presentó la demanda de reclamación a través de su abogado. En la misma, también se presentan algunos documentos y se alude a testigos que probarían dicha relación, como es el caso de la propia madre de la joven y varias amigas de la misma.

Según consta en la demanda, a la que ha tenido acceso este periódico, Alejandro y la madre de Isabel se conocieron en abril de 1987, cuando Alejandro se abría camino en el mundo de la música y era conocido como Alejandro Magno. Se vieron en sucesivas ocasiones y llegaron a trabar una relación de amistad. Después, la amistad pasó a romance y mantuvieron relaciones sexuales. Como consecuencia, la gaditana se quedó embarazada, según su versión, del cantante.

Como cuenta Charo Berea, enseguida se lo hizo saber a Alejandro, quien ya tuvo que pasar por el trance de reconocer a un hijo secreto en el año 2006. Al no obtener una respuesta demasiado contundente del artista (al parecer, argumentó que "qué podía hacer, que estaba liado con su música, que su disco estaba funcionando"), Charo decidió seguir adelante con su embarazo sola.

La niña nacería en el año 1990. Poco después, conoció al que luego fue su marido, Jesús Vázquez Morian, quien terminó reconociendo a la niña y dándole sus apellidos. Isabel, desde luego, siempre creyó que Jesús era su padre biológico hasta que, cumplida la mayoría de edad, pidió que le hicieran una partida de nacimiento y en ella no aparecía el nombre del marido de su madre como padre biológico.

Entonces su madre, al verse que no había otro remedio, decidió contarle toda la verdad a la joven: su padre era, en realidad, Alejandro Sánchez Pizarro, conocido artísticamente como Alejandro Sanz. Y ha sido ahora, tres años después, cuando Isabel ha decidió iniciar los trámites legales para que la reconozca como su primogénita. Ahora sólo espera que el que, dice, es su padre biológico decida someterse a la prueba de ADN, el trámite que exige la Justicia para determinar si es su progenitor o no. De todos modos, todavía queda que la demanda sea admitida a trámite por los jueces.

De ser cierto lo que reclama Isabel, ésta se convertiría en la hija mayor del autor de El alma al aire, quien ya tiene otra niña, Manuela, nacida en 2001 fruto de su matrimonio balinés con Jaydy Mitchell y otro hijo, Alexander, nacido en 2002 y a quien reconoció de forma oficial en 2006.

Ahora sólo falta saber cuál será la reacción del cantante, el proceso a seguir por sus abogados y, si al final es admitida a trámite la demanda, si el artista accede o no a someterse a las correspondientes pruebas de ADN que disiparían cualquier duda. En cualquier caso, ya hay tema para comentar todo el verano: si Alejandro Sanz tiene una hija secreta de 21 años o no.

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