Manuela Sánchez, hija del cantante Alejandro Sanz y de la modelo mexicana Jaydy Michel, ha ofrecido su primer posado y ha concedido por primera vez en su vida una entrevista a una publicación. Lo ha hecho junto a su madre, y ha sido para la revista Vanity Fair.

Manuela, en su graduación con sus padres: el cantante Alejandro Sanz y la modelo Jaydy Michel.

La joven ha vivido toda su vida rodeada de paparazzis y periodistas, debido a la fama que sus dos progenitores tienen pero, durante toda su infancia y adolescencia, sus familias han intentado proteger su intimidad de una forma incansable.

Manuela Sanz, en su primer posado en una revista.

Manuela es estudiante de Diseño de Moda y guarda un parecido físico innegable con su padre, además de su talante reservado. Su primera aparición pública fue con Alejandro Sanz y su pareja, Rachel Valdés, en el festival de San Sebastián, el pasado mes de septiembre, aunque Manuela también tiene una cuenta de Instagram abierta que creó el pasado verano. De la pareja de su padre, comenta en la entrevista que le encanta su arte y que en una tarea de la escuela de moda se inspiró en ella.

En su entrevista, Jaydy habla sobre cómo fue la llegada de Manuela al mundo y de la expectante salida del hospital con ella, donde la esperaba una multitud de cámaras que querían inmortalizar el momento. Todavía se sigue emocionando al hablar de ello.

Con su padre, en unos premios musicales.

La modelo cuenta también sobre sus planes de futuro junto al que es su actual marido, Rafa Márquez, y asegura que le gustaría quedarse en España ya que es un país al que ambos "quieren mucho". Además, habla también de su futuro, en el que seguirá haciendo cosas "que me llenen", asegura la maniquí y, además, comenta que le encantaría ponerse al frente de un programa de televisión.

Jaydy Michel llegó a España desde México con 19 años y aunque su "pretexto" era convertirse en modelo, acabó matriculándose en la carrera de Periodismo tras preparase la Selectividad. Muy poco después, su vida cambió radicalmente y, tras un fortuito encuentro en casa de Luis Cobos con el que hoy es el padre de su hija, Alejandro Sanz, acabó casándose con él.

Recién nacida, a su salida del hospital con sus padres.

En el año 2001 llegó a las vidas de ambos Manuela. Aunque la vida juntos no duró mucho, ya que sus progenitores se separaron en 2005. La joven, que hoy ya es toda una mujer de 19 años, tenía entonces cuatro años y su vida continuó al lado de su madre. A pesar de todo, durante la charla, recuerda su infancia como una época "muy feliz".

“Me parezco a mi madre en que somos perseverantes y honestas”, afirma Manuela

Manuela señala su gran parecido con su madre "en el carácter. Somos perseverantes y honestas", asegura Manuela. A lo que su madre añade que su hija también "es muy tenaz".

Según cuenta Jaydy, el nombre de la joven Manuela viene "porque queríamos que ella tuviese su propia personalidad", además de que su padre quiso que la pequeña nunca olvidara sus raíces andaluzas. Su estilo, entre clásico y urbano, y los referentes de la estudiante de moda van desde Coco Chanel hasta Iris van Herpen. Su mayor rebeldía: cortarse el pelo para donarlo.

Con su madre, en Vanity Fair.

La primogénita de Alejandro Sanz desvela uno de los rituales de su padre antes de salir al escenario, ya que el artista tiene una presencia innegable durante la entrevista: "no sé si lo sigue haciendo, pero suele tomar picante", dice Manuela. "Un sorbo de tabasco es lo mejor para no dejar de salivar", apunta.

Actualmente Manuela se encuentra viviendo en España, tras pasar el confinamiento con su familia materna en Guadalajara. Tras este reportaje, pudo disfrutar del plan que más le gusta cuando viene a nuestro país: disfrutar de sus hermanos y su padre en la casa de campo que la familia tiene al norte de Cáceres, en la pequeña localidad de Jarandilla de la Vera. "Salimos de ruta, jugamos a las cartas, vemos películas...", cuenta. "Somos una familia moderna y funcionamos muy bien. A nuestra manera", zanja.