Recoger la caca o el pipí del perro es responsabilidad de su dueño. Lo recogen las ordenanzas municipales de limpieza de la vía pública y de protección, bienestar y tenencia de animales en Sevilla, donde se recogen sanciones que oscilan entre los 75 y 500 euros. Pese a ello, concienciar al ciudadano de sus responsabilidades sigue siendo misión imposible. 

El que avisa no es traidor. Y eso es lo que se está haciendo la patrulla canina formada por inspectores de Lipasam y agentes de la Policía Local en los últimos días. Policías y operarios de limpieza han iniciado una campaña de control del cumplimiento de la Ordenanza de Limpieza por los barrios Sevilla.

Concienciar sobre la prohibición de que los animales defequen y orinen en las aceras, de la responsabilidad del dueño del mismo y de las cuantías a las que pueden llegar las multas son algunos de los mensajes que los agentes transmiten a los dueños de los animales que pasean por las calles, dentro de una campaña itinerante que se ha iniciado en el barrio de Los Remedios.

👮‍♀️@PoliciaSevilla y @LipasamSevilla están realizando controles por los barrios de #Sevilla velando por el cumplimiento de la Ordenanza de Limpieza.Los agentes portan nuevos lectores de microchips para la identificación de los perros.Gracias por tu colaboración 🐶🐩🐕‍🦺🦮🐕 pic.twitter.com/fQVFnkjWqr

— Emergencias Sevilla (@EmergenciasSev) December 4, 2022

Hace dos años que el Ayuntamiento de Sevilla amplió las sanciones por no recoger excrementos de perro de la vía pública también a los orines. La actualización de la Ordenanza de protección, bienestar y tenencia de animales recoge la obligación de todos los dueños de animales a llevar una botella de agua mezclada con productos desinfectantes siempre que los saquen a la calle para evitar desperfectos en el mobiliario urbano.