El Juez de Instrucción número 16 de Sevilla ha tomado testimonio al organizador de la montería donde murió un niño de cuatro años tras el disparo de uno de los cazadores. También declararon el postor -quien lleva los puestos en la montería- y dos rehaleros, los encargados de los perros. Tras esta tercera sesión de testifical en instrucción, la abogada de la familia del menor, Rosario Serrano, aseguró que estaban estudiando "seriamente" ampliar la acusación a otros agentes que intervinieron en el suceso.
Rosario Serrano, afirmó que las declaraciones continúan afirmando que el niño "nunca se movió de su puesto y que el investigado se sale de su puesto y dispara en dirección contraria, con un resultado fatal". El organizador de la montería confirmó que el acusado "no era el titular del puesto, por lo que no podía disparar ni llevar arma".
La abogada señaló que, cómo todo indicaba desde un principio, "todo apunta a un homicidio imprudente grave". En este sentido recordó que, al principio de las diligencias, tanto el guarda de la finca Las Lapas donde fue la montería como uno de los rehaleros "llamaron la atención al investigado para que se mantuviera en su sitio y no se saliera del puesto".
Las declaraciones de los testigos continuarán el viernes 22 de marzo. Aún no se han recibido los informes de balística por parte de la Guardia Civil.
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