Los 1.700 folios que se supone que tendrá la sentencia de la pieza política de los ERE, el triple de hojas que tenía la dictada por el Tribunal Supremo sobre el procés. Un juicio que quedó visto para sentencia el 17 de diciembre de 2018, después de un año y cuatro días en los que se han celebrado 152 sesiones. Cifras que dan sólo una idea de la documentación que maneja el ponente de una sentencia que será estudiada detenidamente.

En el panorama jurítico español el caso más similar fue la vista del juicio central de Gürtel, llamada Época I, sumó 125 sesiones en algo más de un año, de octubre de 2016 a noviembre de 2017. En esta ocasión la sentencia tuvo 1.687 folios. 

Antecedentes

Cuando el sumario de la pieza política de los ERE llegó a la Audiencia Provincial de Sevilla en febrero de 2017 constaba de 11 CDs que contenían 38 tomos, 14.227 folios en total. A ellos se sumaban 7 anexos documentales compuestos por otros tantos miles de folios. 

Datos para entender el juicio

• Transcripciones. En total se han transcrito al papel 36 comparecencias solicitadas por el tribunal. Pero esto es sólo una parte mínima de las declaraciones producidas.
• Declaraciones. En el juicio intervinieron 22 imputados (a uno de ellos, Antonio Estepa, le retiraron los cargos al final del juicio)  y 150 testigos entre los que se incluyen 9 peritos, tres de ellos de auxilio judicial.
• Vídeos. También se pasaron a papel los 12 vídeos con la declaración como testigo en el juicio de María José Rofa, ex asesora de la consejería de Empleo. Aquí se han sumado por escrito lo afirmado por Rofa durante la fase de instrucción. La declaración del ex director general de Trabajo Javier Guerrero durante esta fase también se ha incorporado a la documentación.
• Folios. El tribunal de la pieza política de los ERE ha manejado una documentación que supera los 1,2 millones de folios. La complejidad de la sentencia no recae sólo en la ingente información que ha debido manejar el ponente.
• Jurisprudencia. A la enorme documentación se suma la complejidad de los asuntos sobre los que el tribunal debe pronunciarse, sobre muchos de los cuales no existe jurisprudencia y la Sala ha tenido que recurrir a artículos doctrinales. 
• Prórroga. El magistrado ponente del caso, Juan Antonio Calle se ha llevado más de 10 meses redactando la sentencia, descansando sólo durante cuatro días de vacaciones.

Con esta sentencia termina un primer episodio de la novela de los ERE a la que aún quedan 186 piezas que componen la macrocausa de los ERE. Desde que la juez Alaya inició la macrocausa en 2011 hasta la lectura de la sentencia de la pieza política de los ERE han pasado casi nueve años y más de 500 imputados si se cuentan las piezas acabadas o archivadas.