El gran homenaje al maestro Ruesga Bono

El mayor éxito para un profesional de cualquier disciplina es haber creado escuela, ser considerado un maestro, tener estilo propio y verlo reflejado en quienes comienzan a ejercer el oficio cuando uno se ha jubilado o está a punto de hacerlo. No encadenar una suma de cargos a los que se llega a dedo, cursus honorum le llamaban los romanos, sino gozar del prestigio entre quienes ejercen la misma profesión, cultivan la misma pasión o compartes una afición. Manuel Ruesga Bono (Sevilla, 1945) ha recibido el calor de un grupo muy selecto. Ser pionero en fotografiar a futbolistas sin balón, ser el autor del álbum oficial del expediente de canonización de Sor Ángela, el autor de la fotografía oficial de Carlos Amigo cuando estrenó la sotana púrpura de cardenal en el Aula Pablo VI. Su discreción, su elegante sencillez y su saber estar en muy diferentes ambientes le llevaron a sitios de privilegio como el estar tan cerca de Javierre en aquellas gestiones ante la Santa Sede, en el Palacio de la Moncloa, por supuesto en el Arzobispal de Sevilla y en tantos despachos de poder en los que pasaba desapercibido durante las entrevistas. Ver, oír y retratar.

Una de las aportaciones de Ruesga Bono más allá de la fotografía ha sido su clasificación de los tres tipos de periodistas. “Los que se enteran, los que no se enteran... Y los que no se van a enterar en la vida”. Una de esas reflexiones que lo convierten en una suerte de Séneca hispalense por su capacidad de observación y de llevar al habla popular definiciones que son de una enorme hondura. De una profundidad notable. En esos momentos Ruesga se parece a Romero, Curro para los neófitos.

Un nutrido grupo de fotógrafos especializados en la Semana Santa le tributaron un homenaje muy oportuno. Almuerzo de hermandad y un cuadro de la Virgen de la Estrella, la que siempre ha guiado a Manolo y a su familia, de la que fue maniguetero, a la que vio coronada por don Carlos aquel 1999 y a la que tiene encomendados a sus nietos.

Gente con ojo y con corazón

Con Ruesga estuvieron muchos de esos fotógrafos que usted ve maniobrar para conseguir la imagen que después llevaremos en la cartera, ilustrarán algún momento de nuestras vidas o expondremos enmarcadas en el hogar. Allí vimos a Pepe Carrera, Carlos Delgado, Mariano López Montes, Javier Torres, José Luis Montero, Luisma Jiménez, Mariano Ruesga, Fernando Hernández, Paco Cuéllar, Julio García, Andrés Alfonso, Ignacio Velasco, Javier Rizo, Manuel Gómez, Antonio Pérez, Manuel Lovillo, Ángel Bajuelo, Javier Perales, Julio Paneque, Pedro González, Guillermo Aguilar, Luis Alonso, Santiago León, Juan Carlos Gallardo, José Antonio Zamora, Práxedes Sánchez, Rafael Alcázar, Javier Montiel, Fernando Salazar, Manuel Agüera, Diego Habernau, Esteban Torres, Pedro Clavijo y Alberto Acevedo.

Gente buena que hacen la Semana Santa con su ojo, su habilidad, su sacrificio, su esfuerzo. Y quien hace la Semana Santa hace la ciudad. Gente que se entera a la primera. Gente sana que el año pasado honró al gran Emilio Sáenz y este año a nuestro Ruesga Bono. La ciudad le honró en 2010. Ahora lo han hecho sus compañeros.