Lotería de Navidad y Sorteo de El Niño: en qué se parecen y en qué se diferencian
Ambos sorteos forman parte esencial de las fiestas navideñas, pero cada uno tiene su propio origen, mecánica y manera de repartir la suerte.
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Los dos sorteos más emblemáticos del calendario español, la Lotería de Navidad y el Sorteo de El Niño, comparten tradición, popularidad y la magia de los Niños de San Ildefonso. Sin embargo, más allá de esa apariencia común, ambos eventos tienen características muy distintas en cuanto a fecha, historia, funcionamiento y premios. Estas son las claves para entender sus semejanzas y diferencias.
La fecha: el Gordo abre la Navidad y el Niño la despide
La primera distinción es puramente calendárica. La Lotería de Navidad se celebra cada 22 de diciembre, convirtiéndose en el pistoletazo de salida de las fiestas navideñas. Aunque inicialmente su fecha osciló entre el 18 y el 23 de diciembre, desde mediados del siglo XX quedó fijada en el día 22.
Por su parte, el Sorteo de El Niño tiene lugar el 6 de enero, coincidiendo con el Día de Reyes. En sus orígenes se realizaba el 5 de enero, pero en 1999 pasó oficialmente al día 6. La distancia de dos semanas entre ambos sorteos hace que muchos jugadores reinviertan reintegros o premios modestos del sorteo navideño en un décimo del Niño.
Antigüedad: dos siglos frente a pocas décadas
Otra diferencia fundamental es la trayectoria. El Sorteo Extraordinario de Navidad nació en 1812, lo que lo convierte en uno de los juegos de azar más antiguos del país.
En contraste, el Sorteo Extraordinario de El Niño es mucho más joven: se instauró en 1941, derivado de rifas benéficas típicas de la época navideña. No fue hasta 1966 cuando adoptó oficialmente su actual denominación, consolidándose como el segundo sorteo más destacado de la Lotería Nacional.
Duración y mecánica: un sorteo maratoniano frente a otro exprés
La Navidad: dos bombos y horas de emoción
El formato del sorteo navideño explica su larga duración. Se utilizan dos bombos:
- Uno para los números.
- Otro para los premios.
Para completar todas las categorías se requieren 1.807 extracciones, por lo que la ceremonia puede prolongarse durante toda la mañana. Además, el orden de aparición de los premios es completamente aleatorio, lo que alimenta la expectativa de cuándo saldrá el ansiado Gordo.
El Niño: bombos múltiples y media hora de sorteo
El Sorteo de El Niño, en cambio, emplea el sistema de bombos múltiples, uno para cada cifra del número ganador. Después, un sexto bombo determina el premio. Este método reduce notablemente el tiempo del evento: unos 30 minutos en total. Ideal para seguirlo durante el tradicional desayuno con roscón de Reyes.
Premios: el Gordo reparte más… pero el Niño premia más veces
Navidad: los premios más altos
La Lotería de Navidad otorga las mayores cantidades:
- Gordo: 400.000 € al décimo (4 millones por serie).
- Segundo premio: 1.250.000 € por serie.
- Tercer premio: 500.000 € por serie.
El Niño: más reintegros y más opciones de premio
El Sorteo de El Niño entrega premios menores, pero más numerosos:
- Gordo: 200.000 € al décimo (2 millones por serie).
- Más reintegros: tres en total, frente al único reintegro del sorteo navideño.
- Terminaciones muy premiadas:
- 2 de cuatro cifras (3.500 € por serie)
- 14 de tres cifras (1.000 € por serie)
- 5 de dos cifras (400 € por serie)
En conjunto, uno de cada tres décimos de El Niño resulta premiado, lo que incrementa notablemente las posibilidades de obtener algún retorno.
A pesar de sus diferencias, tanto la Lotería de Navidad como el Sorteo de El Niño comparten un mismo espíritu: ofrecer un momento único de ilusión colectiva y la oportunidad –por qué no– de empezar el año con un premio inesperado. Ambos forman parte ya de la tradición española, marcando el inicio y el cierre de las fiestas navideñas.
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