Existen muchos aspectos a tener en cuenta cuando nos ponemos al volante de un coche. Uno de ellos es el viento, que, como apuntan desde la DGT estos días en sus redes sociales, puede ser peligroso, ya que puede modificar la trayectoria de nuestro vehículo o lanzarnos contra la mediana de la carretera o contra otro vehículo.
El #viento 🌬️ puede ser muy peligroso cuando vamos conduciendo, ya que puede modificar la trayectoria de nuestro 🚗 o lanzarnos contra la mediana de la carretera o contra otro vehículo. Algunos consejos sobre cómo actuar en estos casos.👉https://t.co/Q5a5DY3WBi#SeguridadVial pic.twitter.com/le6XAXk7MN
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) August 17, 2022
En los próximos cuatro o cinco días se espera fuerte viento de Levante en las costas gaditanas, con rachas máximas de hasta 30 km/h. Momento para revisar algunos consejos sobre cómo actuar en estos casos.
Un golpe de viento puede modificar la trayectoria del vehículo y lanzarlo fuera de la vía. Hay que sujetar con firmeza el volante, evitar movimientos bruscos y reducir la velocidad. Sistemas como el control electrónico de estabilidad y el uso del intermitente a la hora de cambiar de carril suponen una gran ayuda en días como los que se presentan las condiciones menos indicadas en lo que a la fuerza del viento se refiere.
Atentos al efecto pantalla
El viento se convierte en un gran enemigo del conductor porque en décimas de segundo puede modificar la trayectoria de un vehículo y lanzarlo contra la mediana, contra otro coche o fuera de la carretera, con el susto o el accidente que esto puede provocar. ¿Qué hacer para conducir más seguro los días de mucho viento?
Se acabó eso de conducir poniendo una única mano en el volante, únicamente para acompañar las maniobras. En este caso es más necesario que nunca agarrar el volante con las dos manos y con decisión en todo momento, prestando especial atención a las salidas de los túneles, cuando se supera un edificio o en el momento de los adelantamientos, sobre todo a camiones, ya que el efecto pantalla multiplicará la fuerza del viento. Y la estabilidad del coche y el riesgo de accidente aumenta en el caso de que nos encontremos ante viento racheado.
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