Francia anula la decisión de De Gaulle y regresa al mando militar de la OTAN

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció ayer la reintegración plena de Francia en la OTAN, con su retorno al mando militar, como un paso necesario para hacer frente a unas condiciones de seguridad que han cambiado "radicalmente".

"Francia ya no está amenazada por una invasión militar", las amenazas de hoy en día son muy diferentes, según el jefe del Estado galo, quien subrayó que "una nación solitaria en el mundo actual es una nación que no tiene ninguna influencia".

Sarkozy hizo estas declaraciones en la clausura de un coloquio sobre Francia, La defensa europea y la OTAN del siglo XXI, en el que participaron, entre otras autoridades, el secretario general de la Alianza, Jaap de Hoop Scheffer, y el Alto Representante de Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) de la Unión Europea (UE), Javier Solana.

El presidente aprovechó la ocasión para explicar su decisión de que Francia vuelva a participar plenamente en el mando militar de la OTAN y para desmontar las críticas de quienes aseguran que eso implica pérdida de soberanía.

Son críticas procedentes de las filas de la oposición pero también de algunos grupos soberanistas de su propio partido, el conservador UMP. Sarkozy intentó convencerles asegurando que es precisamente el alejamiento de Francia de la OTAN el que limita su independencia nacional.

"Ha llegado el momento" de que Francia no se excluya de una organización en la que ya está participando, insistió, antes de reiterar que París conservará toda su libertad a la hora de tomar decisiones sobre el envío de sus tropas.

Hace 43 años que Francia dejó de participar en la estructura militar integrada de la organización por decisión del general Charles De Gaulle, quien no quería que, en el contexto de la Guerra Fría, hubiese tropas extranjeras en Francia dirigidas por otro país. De Gaulle siempre fue un militar nacionalista que miró con recelo la preponderancia de Estados Unidos en el mundo que salió de la Segunda Guerra Mundial.

No obstante, la opinión pública francesa parece estar de acuerdo con la decisión, según un sondeo de IFOP-Paris Match que se publica hoy, en el que el 58% de los franceses se pronuncian a favor de volver a la estructura militar tras 43 años de ausencia. El apoyo es más claro en los simpatizantes de la derecha (el 76% lo apoya) que en los de la izquierda (52%).

La decisión de Sarkozy de volver a la estructura militar de la Alianza se materializará, salvo sorpresa de última hora, durante la cumbre que la OTAN celebrará a principios de abril con motivo del 60 aniversario de su creación, en Estrasburgo y Kehl.

En todo caso, el Gobierno francés se someterá el 17 de marzo a un voto de confianza de la Asamblea Nacional por su decisión de que Francia regrese al mando integrado de la Organización del Tratado del Atlántico Norte .

"En el momento en que Francia ha optado por reingresar en el mando militar de la OTAN, el presidente de la República y el Gobierno desean (...) asociar al Parlamento a la política exterior planteando la responsabilidad del Gobierno", dijo el portavoz del ejecutivo, Luc Chatel, aludiendo a una formalidad prevista por la Constitución francesa.

El primer ministro francés, François Fillon, ya anunció la semana pasada que el Gobierno se sometería a este trámite, contemplado en la Constitución, después de que algunos gaullistas pertenecientes a la mayoría gubernamental manifestaran su oposición al regreso completo de Francia a la Alianza Atlántica.