Millones de personas han conocido a Volodimir Zelenski hace unos días. Rostro serio y firme. Un hombre de pequeña estatura, casi siempre acompañado por hombres más robustos que le respaldan en sus intervenciones al Mundo. Desde su despacho o desde un búnker en un lugar indeterminado de Ucrania. Siempre contundente en la defensa de su país, decidido a evitar lo que él considera "una orden de borrar nuestra historia, nuestro país, a todos nosotros". Por encima de todo, y de todos. También de su pasado, alejado de la política y el conflicto bélico. Porque a sus 44 años, Zelenski no es un político de carrera ni mucho menos estaba acostumbrado a lidiar con tragedias en su día a día. Esta es su vida antes de llegar a la presidencia de Ucrania.

Volodímir Zelenski es desde mayo del año 2019 el sexto presidente en la historia de Ucrania. Bien podría calificarse de una historia de película, que ha pasado de la comedia al terror en los últimos tiempos. Se licenció en derecho pero nunca llegó a ejercer, atraído por el mundo del espectáculo y la televisión. Cambió los despachos por los platós y trasladó la realidad a la ficción, aunque al final esta ficción ha terminado convirtiéndose en una aterradora realidad.

Zelenski, un todoterreno de la pequeña pantalla

Como si de Emilio Aragón se tratara ha experimentado las sensaciones como actor, comediante y productor. El éxito le condujo a manejar unas de las productoras más famosas del país y a realizar películas y series, casi siempre dentro del género de la comedia, en las que él mismo participaba. Y precisamente uno de esos papeles le cambió la vida.

Zelenski interpretó a un maestro de colegio que terminaba siendo presidente de Ucrania en la serie 'Servidor del pueblo' y el éxito de la serie le llevó a formar el partido político 'Servidor del pueblo'. Y a ganar con un casi un 75% de los votos a Petro Poroshenko, al que se había encargado de parodiar previamente. Surrealista pero cierto. Como si Javier Cámara decidiera sacar de la pequeña pantalla a Juan Carrasco en España. 

Pasó de interpretar a un maestro de colegio que terminaba siendo presidente de Ucrania a formar un partido político para ganar las elecciones de su país

A Zelenski se le acusa desde Rusia de estar dando cobijo y protagonismo a los grupos de extrema derecha en Ucrania, que se dedicarían a alimentar la polarización entre los prorrusos y los europeístas, pero lo que realmente se conoce es que está casado con la arquitecta y guionista Olena Zelenska, mujer hábil en los negocios con la que ha construido una fortuna de más de 15 millones de euros, y que tiene dos hijos, uno de las cuales, su hija mayor, también quiere seguir sus pasos, no como político, sino como humorista (ya ha ganado el concurso 'The Comedy Kids').