Pintura

‘Coria Sacra’, devociones de Coria de la mano del pintor José Suárez

José Suárez en su exposición

José Suárez en su exposición / Juan Carlos Muñóz

“Un pintor es más grande cuanto más pasado recoge”, explica el pintor José Suárez citando a Picasso. Tras una trayectoria artística de más de 45 años y múltiples exposiciones el pintor ha decidido dejar de lado el modernismo que lo caracterizaba para hacer frente a una exposición solemne, dedicada a las deidades de su pueblo, Coria del Río. 

Bajo el nombre Coria Sacra el pintor realiza un viaje por las festividades religiosas de la localidad, recogidas en tres salas: la primera, dedicada a Nuestra Señora de la Estrella, a las cántigas de Santa María de Alfonso X El Sabio y al Gran Poder de Coria. La segunda de ellas, representa el Viacrucis del Cristo de la Veracruz de la localidad, en un recorrido de 10 cuadros que se sitúan en cada uno de los espacios más emblemáticos de la Semana Santa de Coria. Y, por último, una tercera sala en la que el artista ha querido señalar a la hermandad del Rocío de la localidad. 

La idea de esta exposición, que estará abierta en el centro cívico Las Sirenas hasta este viernes 23 de febrero, llegó a José Suárez en plena pandemia, en la que el aislamiento lo llevó a pensar que "la vida es finita" y tras “el refugio en la luz de Veracruz”, tal y como el artista asegura, comenzó a pintar cuadros. 

Esta destaca por el uso de una amplía variedad de colores y de formas, ya que tal y como señala el autor, en sus pinturas "no hay nada al azar", es decir, que basa su arte en el empleo de la geometría y de las matemáticas. En cuanto a sus referentes, en sus cuadros se puede apreciar la presencia de grandes pintores como Picasso, Paul Klee o Kandinski, ya que como el artista asegura: "Cada cuadro lo hago como yo creo que tengo que hacerlo, pero debido a mi bagaje cultural siempre acude a mi inspiración uno de los más grandes". 

José Suárez en su exposición José Suárez en su exposición

José Suárez en su exposición / Juan Carlos Muñóz

La resurrección de un cántico a Coria del Río 

En la primera sala de la exposición, el artista sevillano, realiza un recorrido histórico, centrándose en la hermandad de La Estrella y el Gran Poder de la localidad, al igual que un famoso cántico escrito por Alfonso X El Sabio dedicado al pueblo de la provincia de Sevilla. 

Escrito en el idioma galaico-portugués, el pintor plasma en dos piezas un extracto del cántico dedicado a la localidad, que relata un milagro acaecido en ella. A su vez, en esta sala, el artista presenta varias piezas dedicadas a dos emblemáticas hermandades de Coria del Río, el Gran Poder y La Estrella. 

Con la primera de ellas, el autor busca rendir homenaje a uno de sus hermanos, fallecido recientemente, mientras que con la segunda, Suárez quiere reivindicar el 700 aniversario de la hermandad de La Estrella de Coria, que se celebrará el próximo año 2025. 

Estación a estación de un Via Crucis

La segunda sala, y la central de esta exposición, muestra el recorrido del Viacrucis del Cristo de la Veracruz de la localidad sevillana. Para ello, en la sala se exponen 10 piezas que muestran al Señor desde varias perspectivas y en múltiples puntos emblemáticos del recorrido. 

En estas obras, destaca el uso que el autor realiza del color y las formas, empleando una contraposición entre colores vivos, como el amarillo o el naranja, con los marrones que representan al Cristo y al paso, con la finalidad de mostrar solemnidad y espiritualidad. 

En esta sala, José Suárez, realiza un viaje a su pasado, incorporando en sus obras lugares de su infancia e incluso a su padre, presente entre los espectadores de este Viacrucis. 

"El Pueblo de Coria vive para el Rocío y para su feria de septiembre". Un mensaje que Suárez pretende mostrar en esta tercera y última sala de la exposición, en la que el autor presenta un total de cuatro cuadros que retratan la tradición rociera de la localidad sevillana. 

En ellos, el pintor muestra el simpecado y la carreta de Marmolejo, desde varios puntos de vista y en múltiples momentos del camino. Al igual que en las pinturas anteriores, destaca el uso de la contraposición de colores y de la calidez de las obras, que en este caso buscan mostrar "el esfuerzo que realiza el coriano por sus cosas queridas", sostiene el pintor.

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