Dejar atrás la jaula de oro

Marco Vargas y Chloé Brülé llevan hoy al Central su oda a la libertad inspirada por los textos de Fernando Mansilla.

Chloé Brülé, Marco Vargas y Juan José Amador durante el estreno de 'Libertino' en el FIT de Cádiz.
Ch. R. Sevilla

08 de marzo 2016 - 05:00

Libertino, un espectáculo poético y evocador que tuvo su estreno absoluto en la pasada edición del Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz (FIT), se sube hoy a las 21:00 a las tablas del Teatro Central dentro del ciclo Flamenco Viene del Sur que desarrolla la Consejería andaluza de Cultura.

Los intérpretes y coreógrafos Marco Vargas y Chloé Brülé encabezan el elenco de este montaje coral que ha sorprendido por su belleza y rigor, y que cuenta con seis candidaturas para la próxima edición de los premios Max: Mejor Espectáculo Revelación, Mejor Producción Privada, Mejor Autoría Revelación, Mejor composición musical para espectáculo escénico (Gabriel Vargas y Juan José Amador), Mejor Bailarina Principal (Chloé Brülé) y Mejor Bailarín Principal (Marco Vargas).

De la libertad del baile, del cante y de la poesía es de lo que Libertino trata, según sus artífices. De tres caminos que se bifurcan y que aquí vuelven a confluir alrededor de la jaula vacía a la que se asoman, desde sus respectivos senderos, todos los protagonistas.

Libertino está concebido como un ritual que crea momentos mágicos de diálogo entre los artistas participantes, cada uno representante de diversas disciplinas. Así, la danza que proponen los bailaores Vargas y Brülé (también directores y coreógrafos de la pieza, de una hora de duración) se nutre del cante de Juan José Amador y de la interpretación del escritor Fernando Mansilla, que aporta sus propios textos, tan callejeros como sensoriales. La música original de Gabriel Vargas; la batería de Manuel Montenegro y la guitarra de Gabriel Vargas (ambos integrantes del dúo Tormenta); la dirección adjunta de Evaristo Romero y la escenografía de Antonio Godoy completan una propuesta hipnótica que se viste con los diseños de La Aguja en el Dedo, una de las firmas más interesantes de la moda sevillana de vanguardia. Referente también del trabajo de las productoras privadas andaluzas, tras el éxito de este Libertino confluyen las energías de Elena Carrascal y El Mandaito Producciones.

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