Todo comenzó hace cinco años, cuando la sevillana Isabel Vázquez, exbailarina, coreógrafa y profesora de danza, recordando el impacto que causara en ella aquel anuncio de tabaco americano que presentaba al hombre ideal como un ser rudo y seguro de sí mismo, decidió mostrar en la escena esos patrones masculinos de comportamiento que han dominado -y siguen dominando- la vida familiar y social de nuestra época.

Para ello decidió llamar a seis magníficos bailarines y actores, formados en su mayoría en el Centro Andaluz de Danza, que andaban bailando por otras regiones y países a causa de la penuria y la falta de oportunidades que caracteriza a la danza contemporánea en esta Comunidad.

La oportunidad de realizar la pieza le llegó gracias al programa de producciones de danza local que iniciara Juan Antonio Maesso en el Festival Internacional de Danza de Itálica, continuado en aquella edición por su sucesora en el cargo Victoria Guzmán.

Así pues, gracias a la Diputación de Sevilla (única sostenedora del Festival de Itálica) y a las siete semanas de residencia que les ofreció el Centro Cultural de La Rinconada, se pudo estrenar, el 12 de julio de 2017, en el Monasterio de San Isidoro del Campo, La maldición de los hombres Malboro.

En la pieza, de una altísima calidad dancística, se mezclan los solos y los dúos con unas escenas corales llenas de efervescente dinamismo. Con una mezcla de textos, guiños a los típicos comportamientos masculinos, -hilarantes y a veces incluso dramáticos- y a la incapacidad emocional de los hombres, y unas canciones como Macho Man o el divertido tema de Santi Martínez Los hombres blandengues, la pieza hizo las delicias del público, convirtiéndose en una especie de símbolo de la vitalidad de la danza contemporánea andaluza.

Mas tarde, la obra emprendería una larga gira por todo el país y conquistaría tres premios Lorca y tres premios Escenarios, además de tres nominaciones a los Max.

Un exitoso periplo que se cerró anoche en Sevilla con unas emocionadas palabras de la productora Elena Carrascal y con todo el elenco (los seis intérpretes más los suplentes) y su coreógrafa bailando ya libremente en el escenario del Lope de Vega. Sus aplaudidos protagonistas, todos ellos merecedores de nuevas y ricas aventuras como esta, han sido: Deivid Barrera, David Novoa, Arturo Parrilla, Javier Pérez, Baldo Ruiz, Indalecio Seura y Álvaro Copado.