Con la globalización prácticamente perdió su significado el término underground que aplicábamos a la música. Ahora nada está oculto, nada es subterráneo porque podemos sacarlo a la superficie con apenas un par de clicks en nuestros dispositivos digitales. Pero si echamos el pensamiento hacia atrás podemos recordar que con esa expresión definíamos unos géneros en la música y en otras formas de comunicación destinados a una audiencia minoritaria, cuando no de élite. Centrándonos en la música, las corrientes undergrounds se caracterizaban por sus altos niveles de originalidad y experimentación, sin ajustarse a los estándares, tendencias o hypes que establecían los medios de comunicación populares.

Los tres artistas que irán pasando por la Sala X entre mañana y el 2 de diciembre encajan perfectamente en esa descripción. Mezclan ideas que trascienden las etiquetas convencionales y no sufren las ataduras de los grilletes canónicos, para desarrollar estilos de imposible clasificación y acusada personalidad, que se mantendrán habitualmente reducidos a la escucha de audiencias muy pequeñas, a no ser que tengan la suerte de dar con un trampolín que les ayude a dar un salto enorme, como ha sido el caso de Judeline, a la que la mismísima Rosalía ha incluido en MotomamiSS$$, su lista de escucha de Spotify. Ella es una de las artistas del trío que podremos ver, junto a Ralphie Choo y Paco Moreno.

Este ciclo de conciertos es una iniciativa de Los Dominguito, nombre por el que conocemos a la sociedad compuesta por Miguel Olivencia y Jesús Sánchez, habituales del ocio nocturno sevillano, que van más allá del uso de la escena de clubs, formada por las principales salas de la ciudad una vez que han terminado los conciertos programados, como espacios centrados en la electrónica, y le han dado forma a un colectivo que se abre a la mezcla de todo tipo de géneros, afrobeat, global bass, funk favela, reguetón y cualquier otro que podamos meter en la talega que llamamos música urbana. Aunque habitualmente colaboren con artistas locales, Los Dominguito no se cierran puertas más allá de Sevilla, organizando giras por Valencia, Barcelona, el País Vasco, y son los que habitualmente cierran el festival Alhambra Monkey Week, en el que vuelven a participar este año, con la programación de uno de sus escenarios -el Escenario Monkey Club-, en el que tomarán el pulso a las tendencias actuales de la música de clubs con una programación creada por ellos.

Ralphie Choo

Con el intermedio del Monkey, que se celebrará entre los días 24 y 26 de noviembre, el ciclo de tres conciertos que Los Dominguito, con el patrocinio de Jameson, han propuesto para la Sala X, comenzarán mañana sábado con el de Ralphie Choo, un joven artista manchego que iba para ingeniero químico, reconvertido en alquimista sónico que prepara fórmulas magistrales mezclando synth-pop, house minimalista, pop lo-fi y cualquier género con el que encuentre posibilidades de fabricar un híbrido interesante, incluido el flamenco; de hecho, su tema Lamento de una supernova comienza con unas palmas por tangos hábilmente sampleadas. El ahora tan familiar bedroom pop gana en riqueza estética con innovadores como Choo, algo que podremos comprobar con su propuesta escénica, que engloba visuales, escenografía y estilismo muy personalizados, junto al entramado de voces digitales y armonías complejas que bailan entre lo naif y lo sofisticado, que supone su música.

El acceso a la sala podrá realizarse a partir de las 21:00 horas y antes de que Choo ocupe el escenario calentará el ambiente Pableau, un músico residente en Sevilla, que se mueve entre el dreampop y el rap, géneros a los que le gusta subvertir con venenos tropicales como la bossa nova. Las entradas pueden adquirirse a través de Eventbrite y Última entrada.

Paco Moreno

El segundo concierto del ciclo tendrá lugar el día 21 de este mes y correrá a cargo de Paco Moreno, un artista almeriense, afincado en Granada, que diseña disparatadas rumbas con las formas más artesanales del DIY, partiendo de boleros, rancheras, cumbias -su tema Algo bello es arquetípico-, con una enorme capacidad creativa, que viene desarrollando ya desde hace diez años. Su directo no nos es desconocido porque ya pudimos apreciarlo en la pasada edición del Monkey Week. Para el tercer concierto tendremos que esperar un poco más porque tendrá lugar el 2 de diciembre, que será cuando veamos a Judeline, nombre artístico que usa Lara, una chica de 19 años de Los Caños de Meca, de los que lleva ya dos residiendo en Madrid, que a raíz de que el productor y cantante Alizzz la eligiese como una de las pocas artistas emergentes que merecieron su atención para el proyecto Descalificados, que explotó en las redes en 2020, ha trascendido desde las escuchas en streaming -su canción De una manera lleva 1.700.000 escuchas en Spotify y sigue subiendo- a las apariciones en vivo en varios festivales, como el Cruïlla y salas de renombre como la madrileña El Sol. O la Sala X, donde podremos apreciar el neo soul de Judeline próximamente.