Revolución en el convento

Tres coches de caballos aparecían por la calle Feria cargados con diez monjas que cantaban y alababan al Señor. Algún viandante despistado parecía ofenderse, pero lo cierto es que había una explicación lógica para tanto revuelo: Sister Act, el musical, al fin ha llegado a la ciudad hispalense. Después de su estreno en Barcelona, donde las hermanas del Convento de los Ángeles conquistaron al público durante toda una temporada, el musical se puso en carretera para visitar 21 ciudades españolas, entre ellas tres andaluzas, Córdoba, Málaga y Sevilla, donde del 19 de al 29 de noviembre podrá disfrutarse, en el Auditorio Fibes, de esta adaptación de la ya clásica película de los 90.

Mireia Mambo, una barcelonesa de 26 años formada en el Performers College de Inglaterra, es la encargada de tomar el relevo de Whoopi Goldberg para dar vida a Deloris, una cantante aspirante a diva que ve truncados sus sueños cuando presencia un terrible asesinato. En su huida de la Policía no le queda más remedio que esconderse en un convento. Aunque su carácter rebelde e incorformista choca con las estrictas normas de la madre superiora, interpretada por Àngels Gonyalons, pronto conseguirá ganarse el afecto de sus compañeras de celda y contagiarles su amor por la música de los años 70, como los sonidos de Motown Records, el soul o el funk. "Es una suerte poder estar en contacto con estos estilos, porque aunque yo no conocí esa época ahora la siento muy cerca. Es como si el musical me transportase hasta esos años", cuenta la protagonista del espectáculo, coproducido por Stage Entertainment y El Terrat.

Aunque el montaje sigue el mismo hilo argumental que la película, las partituras compuestas por Alan Menken, ganador, entre otros premios, de ocho Oscar y recordado por títulos como La Sirenita, La Bella y la Bestia o Aladdin, le dan un toque único a la adaptación. "En la película aparecían algunas canciones, pero no eran el foco principal de la historia. Aquí, sin embargo, la música hace que el espectáculo vaya mucho más allá", considera Gonyalons. "La gente disfruta tanto en directo que se olvidan de la película. Luego cuando llegan a casa empiezan a recordarla y se dan cuenta de todas las diferencias que hay entre las dos versiones, pues ni la banda sonora coincide", concluye. Pero antes de que los amantes del filme original se lleven las manos a la cabeza hay que decir que esta producción ha sido supervisada desde el primer momento por la propia Whoopi Goldberg, quien además asistió al estreno en Barcelona. "Escuchar a la gente reír y aplaudir tanto como lo hacen en Sister Act es una experiencia mágica para un productor", afirma la actriz estadounidense.

Además de Deloris y la madre superiora, el otro gran protagonista de este musical es "esa gran ameba que forma el coro de monjas. Es increíble la ternura que desprenden. Emociona escucharlas cantar, sobre todo en la escena de Es tu voz. Las observo desde dentro y tengo que recomponerme antes de salir de nuevo al escenario", confiesa Gonyalons, cuya voz puede resultar familiar al espectador porque, además de actuar en numerosos musicales -y de haber fundado la primera escuela de teatro musical de España- trabaja como actriz de doblaje para muchos personajes, entre ellos la popular Wilma Picapiedra.

Pero además de música y baile, el espectáculo cuenta con un gran despliegue de profesionales. Tres días de montaje y 17 toneladas de material son necesarias para que cada noche el escenario se convierta en toda una fiesta, en la que el público también puede participar. De hecho, las actrices prometen que si los espectadores "se portan bien" y no graban ni hacen fotos durante la función, al final del musical celebrarán una "gran comunión" en la que todo el mundo podrá levantarse a bailar y sacar su telefono móvil para compartir ese "momento tan especial" colgando sus recuerdos con la etiqueta #YoestuveenSisterAct. "Alucinante es la palabra que más repiten en las redes sociales. Y eso es lo que queremos conseguir, alucinar y divertir a todo el mundo", termina Gonyalons.