"¿Está usted pensando en casarse? Si es así, pregunte por Petro". Ése podría ser, perfectamente, su reclamo comercial. En los cuarenta años que lleva en el mundo de la moda, este diseñador sevillano ha tenido el honor de vestir a algunas de las novias más elegantes, como por ejemplo Tessa de Baviera, Marisa de Borbón y la propia Infanta Elena. Ha colaborado también con Pedro del Hierro y la firma Novíssima. pero para Valverde, nunca terminan los retos.

-Petro, díganos la verdad. ¿Se siente profeta en su tierra ?

-Yo creo que eso de que España no valora a sus diseñadores es un tópico que se debió inventar alguien que no terminaba de destacar. Una de las cosas más bonitas que me han pasado, ha sido convertirme en hijo adoptivo del pueblo de mis padres. Con eso, creo que queda todo dicho.

-Sus comienzos en el mundo de la moda, fueron en Sevilla. ¿Qué le ha dado esta ciudad?

-Sevilla siempre ha sido mi fuente de inspiración, sobre todo, en lo referente al color. Ten en cuenta que comencé como aprendiz en un talle de costura a los catorce años, en la Sevilla de los años 60. Yo venía de una familia humilde y he tenido que luchar mucho e incluso vencer la oposición de mis padres. No puedo olvidar mis raíces y por eso, siempre vuelvo.

-La última vez que lo vimos en la capital hispalense fue hace muy poquito, en el Simof. Saludaba usted a la diseñadora Juana Martín, ¿qué opina de su trabajo?.

-Me parece una mujer muy valiente y creativa, además de una trabajadora incansable y excelente diseñadora.

-Habla de ella con mucho cariño. ¿Es difícil hacer amigos en el mundo de la moda o es sólo un mito?

-Bueno, es complicado, pero no imposible. Hay algunos se consideran el mejor y eso genera guerras de egos y envidias. Es un mundo en el que hay muchas envidias. La gente está insegura y si te va bien consideran que le estás robando el trabajo a cualquier otro.

-La que debe de estar encantada con usted es doña Elena. La infanta está considerada como la mejor vestida de la Corona Española, y muchos de los diseños que lleva, tienen su firma. ¿Qué puede decirnos de su estilo?

-Tiene una manera de vestir muy personal, que resalta su porte y elegancia.

-Ya que hablamos de la Casa Real... ¿Cree que son justas las críticas que se han vertido sobre el look de la Princesa de Asturias?

-Yo opino que se la juzga demasiado, hay que darle tiempo. Aún debe encontrar un estilo que la defina a la perfección.

-Dicen que Noor y Rania son auténticas fashion victims. Después de haberles confeccionado varios modelos, ¿qué puede decirnos de esto?

-Para mí fue una experiencia muy enriquecedora y además nos une un trato excelente, tanto profesional como personal. En cuanto a lo que se ha comentado sobre su "delirio" por las boutiques europeas, opino lo mismo que he dicho sobre la princesa Letizia, creo que cada persona es libre para elegir su estilo. ¿Por qué ellas no pueden?

-Usted es el escogido de mujeres de la nobleza como la Baronesa de Güel y la Marquesa de Camporeal. Si fuese usted quien tuviese que elegir diseñador, ¿por quién se decantaría?

-Pues si fuese mujer escogería al maestro Elio Berhanyer, por su profesionalidad y su categoría personal.

-Lleva ya más de 30 años en la moda, así que es usted uno de los pocos que puede presumir de haber visto evolucionar la alta costura española desde dentro. ¿Han cambiado mucho las cosas desde que empezó a diseñar?

-La moda siempre esta cambiando, sino estaría muerta. Lo mejor del panorama actual es la cantidad de opciones que tienen los jóvenes diseñadores. A nosotros, eso no nos pasaba, era muy difícil darse a conocer.

-Ahora parece todo tan sencillo que hasta las hermanas Cruz se han metido a diseñadoras. ¿Qué le parece que los famosos creen colecciones para las grandes cadenas de ropa?

-A mí me parece bien, que lo disfruten como una experiencia más que les brinda la vida... Siempre y cuando no se convierta en intrusismo profesional.