Pedro Halffter, que aspira a continuar en el cargo, junto al francés Marc Soustrot, el italiano Giacomo Sagripanti, el estadounidense John Axelrod, el húngaro György G. Ráth y -como ya adelantó a principios del pasado mes de junio este periódico- el británico de ascendencia gibraltareña Karel Mark Chichon. Son los seis candidatos a asumir las direcciones artísticas de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS) y del Teatro de la Maestranza, toda vez que ayer expiró la relación profesional que en los últimos diez años ha ligado al madrileño a dos de las más significadas instituciones culturales de la ciudad, a las que llegó avalado por el profesor y ex delegado municipal de Cultura Juan Carlos Marset.

Por imperativos legales, la renovación de Halffter era imposible, y el Ayuntamiendo de Sevilla, la Junta de Andalucía y el Ministerio de Cultura, las administraciones que gestionan la orquesta y el coliseo del Paseo Colón como buque insignia de su política cultural en Sevilla, pusieron en marcha un proceso de selección mediante invitación -nadie ha podido postularse sin que previamente se le haya abierto la puerta- que ha destacado por su opacidad, y que ha coincidido, no casualmente, con una de las etapas más turbulentas de la orquesta de puertas para adentro, rematada en junio con la convocatoria de huelga (evitada a última hora) durante las cuatro funciones de la ópera El ocaso de los dioses, que supuso el cierre de la espectacular Tetralogía del Anillo de Wagner.

La nueva etapa de la ROSS y el Maestranza, ya sea con Halffter de nuevo al frente o bien con cualquiera de sus cinco colegas que competirán por el puesto, desvelados ayer por El Mundo, concluirá antes del 31 de agosto, o ese es, al menos, el deseo de sus responsables, que guardan un mutismo casi absoluto acerca de este proceso, reforzado por su compromiso de confidencialidad. Se sabe, no obstante, que el Ministerio de Cultura es el gran valedor de la continuidad de Pedro Halffter, hasta el punto de que fuentes cercanas a este asunto hablan de la "intención de Madrid, que está muy lejos de Sevilla, de imponer" a su candidato; que el Ayuntamiento apuesta también por el hasta ayer mismo director artístico de la ROSS y el Maestranza; y que la Junta de Andalucía, como ha venido expresando desde hace meses y con máxima claridad el propio consejero de Cultura, Luciano Alonso, considera que "la etapa de Halffter se ha acabado y ahora toca otra cosa".

Juan Víctor Rodríguez Yagüe, director del Teatro Lope de Vega, en representación del Ayuntamiento; Manuel Ferrand, responsable del Área de Música de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, por parte de la Junta; Antonio Garde, subdirector de Música y Danza del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (Inaem), como representante del Ministerio; y Francisco Rosario, trombón solista de la ROSS, en nombre de los músicos, integran la Comisión Técnica que durante este mes seleccionará dos, quizás tres, de los seis proyectos presentados; más tarde, el Comité de Selección -compuesto por sendos representantes de las tres administraciones: Ayuntamiento, Junta y Gobierno central- seleccionará definitivamente a uno de los candidatos, y a éste se le encomendarán las dos direcciones por un periodo de cuatro años, con posibilidad de prolongarlo a su término durante otros cuatro.

Estos días se ha conocido también una encuesta interna realizada entre los músicos de la Sinfónica, sin ningún tipo de valor vinculante aunque muy elocuente acerca del resurgimiento de la conflictividad laboral que entrañaría la reelección de Halffter: "Un lío, y un gran error en nombre de no se sabe muy bien qué tipo de razones políticas", señaló a este diario una persona conocedora del proceso. En ese sondeo, sólo cuatro de los 70 músicos votaron por la continuidad del madrileño.

La incógnita se despejará durante el próximo mes; que, como apunta gráficamente esta misma fuente, "va a ser calentito".