La tele más Real del año
El barrio de los milagros
Enemigos | Crítica
La ficha
** 'Enemigos'. Drama, España, 2025, 103 min. Dirección: David Valero. Guion: D. Valero y Alfonso Amador. Fotografía: Alberto Pareja. Música: Steve Lean, Remate, Bnet. Intérpretes: Christian Checa, Hugo Welzel, Luna Pamiés, Estefanía de los Santos, José Manuel Poga.
Se mueve esta Enemigos por los contornos de aquel cine social español de comienzos de siglo que despuntó con títulos como El Bola o 7 vírgenes en su retrato de la juventud descarriada y la vida de barrio. Lo hace actualizando el modelo (no en vano producen también los Félez) con potente banda sonora rapera-trapera, look videoclipero y un esquema argumental que busca su lección sobre la empatía y la compasión con una historia poco probable de enemistad revertida entre dos jóvenes marcados por la precariedad y la violencia en el extrarradio marginal valenciano.
A un lado, Chimo (Christian Checa, todo pundonor) es el chico noble, apocado y trabajador que cuida de su abuelo, sueña con sacar a la familia de la precariedad y vive atemorizado por el bullying constante de El Rubio (Hugo Welzel), matón callejero que le hace la vida imposible desde la infancia. El destino (escrito) quiere entonces que las tornas cambien, aunque ahí donde la lógica dictaría la venganza o el desprecio, una extraña fuerza empática, solidaria y redentora se pone en marcha como nuevo rumbo para la historia. Y hasta aquí vamos a destripar.
Enemigos se articula desde ese momento como un relato moral de explicaciones y justificaciones, un cuento urbano sobre el origen del mal y, como diría el nuevo Papa, su fracaso para prevalecer. La película de David Valero se mueve siempre por la cuerda floja de la credibilidad aunque convencida de su rumbo, lastrada por un guion con trampas y agujeros y algunos personajes e interpretaciones muy pasados de rosca, siempre en busca de un mensaje de superación que cale entre ese público juvenil al que va calculadamente destinada.
Temas relacionados