Tradición, tradición, lo que viene siendo tradición en este mes de noviembre es el Tenorio y no Halloween con esos muertos vivientes dando la brasa en calles y colegios, Y pasado el purgante de esa fiesta celta que los yanquis exportaron a lugares como este país nuestro, tan permeable a cuanto llega de fuera, llega Don Juan. Ese personaje que Tirso de Molina bautizó como Burlador de Sevilla y que llegó a Don Juan gracias a Zorrilla va a cobrar vigencia en este noviembre. Con bastante más notoriedad que estos años atrás más la nota singular de que va a campar a sus anchas por un escenario que le es tan familiar como el cementerio. Desde esta tarde, Don Juan rondará a Doña Inés en el camposanto y la verdad es que resultará curioso verlo deambular espada en mano por tumbas como las de Susillo, Joselito o el Espartero. Al fin, una tradición de las de verdad.