Madrileña criada en Málaga y gaditana de vocación tardía, su punto de partida hacia el estrellato es Sevilla. Ocurrió hace veintitrés años en el Lope de Vega y el punto de fusión para que Sevilla la encumbrase fue cómo dijo Ojos verdes. Desde Concha Piquer no se mecía con tanto gusto la legendaria copla de Valverde, León y Quiroga. Esa noche conquistó Sevilla y salió como un tiro hacia el éxito. Lucía de Serrat, Banderas de nadie o la oda a Camarón en Cómo te extraño de Sabina son otras canciones que Pasión Vega fue utilizando como cimiento de sus recitales y esta noche vuelve a Sevilla rodeada de la expectación habitual. Con 40 Quilates, esta excepcional artista pondrá a Sevilla nuevamente en pie en el Maestranza, seguro que sí. Como la puso aquella noche de hace más de veinte años en el coliseo del Parque con Ojos verdes, verá usted como eso es así.