Más datos de esa nueva normalidad que nos tiene en un insoportable sin vivir. Con la temporada sin rematar ya hay que ir previendo cómo será la próxima mientras los rebrotes se multiplican y los confinamientos van reapareciendo en cualquier rincón de la piel de toro. Y viendo cómo todo se basa en suposiciones imagino que los autores del planning del nuevo curso serán expertos de los de verdad de la buena y no como otros.

Decíamos días atrás que la pretensión es que la Liga arranque el 12 de septiembre con licencia para los inmersos en competiciones continentales, que lo harían más tarde. A todo esto sin que se haya acabado la Liga en Segunda y sin que se sepa cuándo podrá rematarse con el lío del Fuenlabrada haciendo estragos. Además, con Champions y Liga Europa acabando a final de agosto con permiso del bichito, conque a ver cómo se las avía el autor del calendario con cara de jeroglífico.

Otra chinita más en el zapato del artista es condicionar el calendario de forma que los equipos que juegan partidos europeos coincidan entre ellos en las primeras jornadas a fin de no perturbar a los demás. Los que caigan en octavos europeos arrancarían el 19, una semana más tarde que el pueblo llano, pero los que, como el Atlético que ya ganó la plaza, pasen a cuartos no empezarán hasta el 26. Como se ve, el descalzaperros ocasionado es tremendo, pero ahí no acaba la cosa.

Por si no querías caldo, dos o tres tazas, las fechas FIFA, tan intocables. La selección española juega 3 y 6 de septiembre Nations League ante Alemania y Ucrania, respectivamente. En las selecciones abundan futbolistas que juegan competición continental, conque átese esa mosca por el rabo. Doctorado en Física Cuántica será lo mínimo que registre el currículo de quien haya de poner orden en tamaño disparate. Y es que los designios del bichito cabrón son inescrutables.