La comisión gestora de la Mancomunidad del Aljarafe, integrada por 34 municipios a los que Aljarafesa presta servicios de abastecimiento y saneamiento de aguas, ha aprobado por unanimidad el presupuesto de dicha entidad, que asciende a 40 millones de euros. Según Joaquín Fernández Garro (PSOE), vicepresidente ejecutivo de la empresa y alcalde de Umbrete, el presupuesto responde a "los principios básicos de mantener el equilibrio entre gastos e ingresos, garantizar la actual calidad del servicio al menor coste posible, aumentar las bonificaciones a jubilados, familias numerosas y colectivos de escaso nivel de renta, en base al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem) y garantizar las inversiones".

Para conseguir esos objetivos, y según un comunicado de la entidad, la empresa "tiene que superar los mayores gastos que le va a suponer, por un lado, la entrada en servicio de nuevas instalaciones, y por otro, la disminución de ingresos, al seguir bajando el consumo per capita. Estas circunstancias, unidas a la previsible subida de los precios en 2012, podrían haber supuesto un incremento tarifario del orden del 10%, para equilibrar los gastos a los ingresos".

La política de reducción de gastos, que viene empleando la empresa en los últimos años y que se verá incrementada en 2012, hace prever que, con la actualización tarifaria al IPC (3%), "no solamente se consiga mantener su salud económica sin poner en riesgo las inversiones y los criterios de explotación, lo que garantizan la calidad del servicio que presta a los vecinos del Aljarafe, sino que permitirá aumentar el actual sistema de bonificaciones, uno de los principales objetivos políticos de la empresa, consciente de la situación económica de muchos hogares aljarafeños, compartiendo el compromiso social de los Ayuntamientos servidos".

Precisamente, las rentas más desfavorecidas se llevan una gran parte de la actualización tarifaria. En palabras de Fernández Garro, "las bonificaciones para ellos estarán por encima del IPC", ya que se aumentarán en un 5% las bonificaciones de los jubilados, pudiendo hasta triplicarse ese aumento porcentual en el caso de rentas deprimidas de familias numerosas.