La que era una de las zonas de expansión más importantes del PGOU que Camas aprobó en el año 2000 y de toda la primera corona del Aljarafe: el plan parcial de El Manchón, más de 50 hectáreas que se denominaron comercialmente Vega del Rey, tiene hoy, diez años después de que se iniciaran las obras de urbanización, una ocupación mínima. En concreto, el 68% de todos los metros cuadrados de oficinas y de industria escaparate que se podían haber construido son solares vacíos.

Según datos del área de Urbanismo, se ha colmatado casi al completo el uso residencial, salvo una parcela. Pero están libres la mayoría de los solares para industria escaparate, es decir, zonas comerciales, que junto a las oficinas fueron los ejes por los que apostaron los promotores de la zona, que, antes de la crisis, generó muchas expectivativas, por su cercanía a Sevilla, a la SE-610 y la SE-30.

De la superficie del plan parcial para industria escaparate se han ocupado por edificación 7.200 metros. Al margen de que parte de los inmuebles construidos están también vacíos, ello supone que sigue disponible más del 90% de todo lo que se puede construir. En cuanto a las oficinas, está disponible el 66%.

Con el objetivo de luchar contra ese hecho y alentar la ocupación, y la repercusión en la economía en Camas y en la comarca, el Ayuntamiento va ampliar ahora los usos posibles. Según el concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Marín, se ha iniciado ya una modificación puntual del plan parcial para que cada parcela, independientemente del uso que ya tiene asignado, pueda albergar otros compatibles, pero que no se incluyeron de forma exhaustiva en la redacción original, con la que se atendió a la propuesta de los promotores del proyecto. Así, a la lista de usos productivos, además del comercial de oficinas, comercial y de hospedaje (éste también se ha desarrollado ya), se ha incorporado el terciario de espectáculos.

También se va ampliar el tipo de usos que pueden tener los sistemas de interés público y social, el suelo público para servicios públicos, pero además en otras parcelas que son privadas y que podrán albergar equipamientos y servicios de este tipo, de carácter sociocultural, administrativo o de servicios urbanos, dada la ubicación, con proyección metropolitana.

Todo ello, según la memoria de la modificación, que se aprobó de forma inicial en el último Pleno municipal del año y que está en exposición pública, conlleva un "salto cualitativo". Como ejemplo, se destaca que ahora se permitirá la introducción de "dotaciones" en parcelas privadas, de forma que suelos previstos para industrial intensivo puedan acoger guarderías, academias o servicios médicos de carácter privado. Según recuerda el edil de Urbanismo, un uso tan lógico y demandando como el de residencia para mayores o discapacitados no se había contemplado, a pesar de la cercanía de este parque a zonas urbanas residenciales, como el propio núcleo principal de Camas o la barriada de La Pañoleta. Fue, precisamente, el interés de unos inversores en ese sentido en una parcela lo que dio la idea de una ampliación de usos de forma genérica.

Tras la aprobación inicial en el Pleno, se le notificará a los propietarios y a las comunidades de propietarios, aunque no se espera que pongan pegas en este sentido, en tanto que se ven beneficados. También deben emitir informe los departamentos de carreteras y las empresas suministradoras. Dependiendo de las alegaciones que se presenten y de cómo se resuelvan, la aprobación definitiva podría producirse en dos o tres meses.