La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a una pena de diez años de prisión a un individuo de 47 años, identificado como A.C.M., por abusar sexualmente durante casi una década de una menor de edad diciéndole que "lo hacía para enseñarla y prepararla para cuando fuera mayor".

La sentencia, al que ha tenido acceso Europa Press, considera probado desde "su más tierna infancia" la víctima, hoy una joven de 23 años, era atendida por una mujer ya que su madre salía de su casa para trabajar a diario sobre las 5.00. En 1992, cuando la menor tenía unos siete años, la cuidadora de la niña se casó con el hoy condenado, a quien la menor llegó a cogerle cariño.

A partir de esa relación matrimonial comenzaron los abusos, que se producían de "forma habitual" en el domicilio del procesado, en Dos Hermanas, donde la denunciante acudía con frecuencia, pernoctando incluso los fines de semana. La menor dormía en aquella vivienda en una habitación al lado del matrimonio, adonde el acusado acudía para cometer los presuntos abusos.

Los magistrados explican en la sentencia que la víctima, durante aquella época, "no era consciente de la trascendencia de los hechos y de su significación", pues incluso el acusado le comentaba a la menor que "cada hombre tenía un niño para él", que "lo hacía para enseñarla y prepararla para cuando fuera mayor" y que "no le contara nada a nadie".

La víctima fue concienciándose de lo que pasaba y al cumplir los 15 años empezó a eludir al imputado y se negaba a acceder a sus exigencias sexuales. Tras pasar en el verano de 2005 unas vacaciones con sus padres, la perjudicada decidió denunciar los hechos tras superar el sentimiento de culpabilidad creado desde su infancia y contarle a su madre lo sucedido.

La condena incluye el pago de 90.000 euros a la joven en concepto de indemnización.