Mientras se resuelve el proyecto para desdoblar la N-IV en el tramo que une Los Palacios y Sevilla, una reivindicación que se ha avivado tras el último accidente mortal, el Gobierno de Mariano Rajoy baraja una alternativa para paliar la alta siniestralidad de esta carretera: desviar el tráfico pesado a la autopista de peaje, la AP-4. Así lo desveló este martes la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, quien consideró esta medida, que se encuentra en estudio por parte del Ministerio de Fomento, como la "más factible en este momento". 

Frente al recrudecimiento de las protestas tras el nuevo accidente mortal en esta calzada, Crespo explicó que lo mejor es que los vehículos pesados circulen por la AP-4 "de forma más urgente" en un momento en el que "hay bastantes accidentes" de tráfico mientras se espera un desdoble de la carretera, que para nada "está descartado". 

Al igual que se ha llevado a cabo en Cataluña, Fomento estudia proponer la posibilidad de que los camiones puedan cubrir sus rutas a través de la AP-4 "con unos precios asequibles" en lugar de utilizar la N-IV. 

El punto kilométrico 565 de la carretera N-IV fue este martes el escenario de un acto convocado por el alcalde palaciego, Juan Manuel Valle (IP-IU), en demanda de soluciones a la alta siniestralidad que registra esta vía. Tras colocar una corona de flores junto a un panel que asemejaba una lápida en memoria de las personas fallecidas en esta carretera, Valle reclamó su transformación en autovía o la supresión del peaje que pesa sobre la autopista AP-4. El alcalde palaciego leyó un manifiesto en el que agradeció la participación del PSOE y el PP en el acto. 

Los andalucistas, por otro lado, denunciaron este martes ante el Juzgado de Guardia a la consejera de Fomento y Vivienda, Elena Cortés (IU-CA), y de nuevo a la ministra de Fomento, Ana Pastor (PP), argumentando "un presunto homicidio imprudente" derivado del último accidente de tráfico mortal en el trazado sevillano de la carretera N-IV. El vicesecretario de Organización del PP en Sevilla, Juan de la Rosa, que defendió que Fomento "no mira para otro lado", reclamó que no se haga "demagogia" con los fallecimientos y exigió al "arreglo" de la nacional.