Antonio Gutiérrez Limones hizo efectiva ayer su renuncia como alcalde de Alcalá de Guadaíra después de 21 años. Su marcha se barruntaba desde hace meses, cuando fue incluido en la lista al Congreso y elegido diputado, ya que en los estatutos del PSOE son cargos incompatibles. Pero se confirmó finalmente sólo un día antes de que el PSOE de Sevilla ratifique sus listas para el 26 de junio, dejando claro que Limones sigue de número tres, con lo que se garantiza su reelección. El PSOE sigue confiando en que el caso ACM, que se investiga en el juzgado y en el que la Fiscalía ve "poderosos" indicios de delito que apuntan al ya ex edil será sobreseído, aunque tendrá que lidiar en la campaña electoral con esas sospechas.  

Se trata de un caso que se inició "hace tres años" y que ya una vez devolvió el Supremo, destacó Verónica Pérez, secretaria provincial del PSOE, que arropó a Limones  en el anuncio de su decisión, en una rueda de prensa en la sede provincial del PSOE. Limones dijo que se va ahora porque no podía volver a pedir el voto a sus vecinos para el Congreso siendo alcalde, que no lo ha querido hacer antes -admitió que el PSOE se lo propuso- porque creía que debía seguir en tiempos difíciles. Pérez sí admitió que, además, "había que esperar el momento más beneficioso para garantizar la estabilidad política de Alcalá", pero descartó que se haya negociado junto al acuerdo que ha permitido al PSOE asumir la Alcaldía de Granada. Otras fuentes dan por hecho que el entendimiento con Ciudadanos podría despejar escollos para que el PSOE mantenga Alcalá sin mayoría absoluta con su nuevo candidato.  

Ni Limones ni Verónica Pérez quisieron confirmar quién será esa persona, en un Pleno que, como muy tarde, debe convocarse en 20 días. Sus respuestas fueron protocolarias: se reunirá el grupo, propondrá un nombre a la agrupación socialista, "hay equipo". Pero, salvo sorpresa, será Ana Isabel Jiménez, número tres en las listas de las municipales. Es la apuesta de Susana Díaz. Ahora forma parte del Gobierno de la Diputación y, ayer, junto a otros edil del PSOE, acompañó a Limones en su despedida. 

La marcha del alcalde neutraliza el intento de moción de censura que los grupos de IU, el PA y dos de los  cuatro ediles de Alcalá Puede habían anunciado, insistiendo en que el caso ACM es un caso de corrupción, que Limones estaba usando Alcalá para buscarse una salida política y perjudicando el interés general. Ya se habían reunido con el PP y la edil de C's -otra está ya como no adscrita y dos ediles de Alcalá Puede también van por libre- aunque les quedaba lo más difícil: poner de acuerdo a fuerzas antagónicas en un candidato alternativo. "Venden humo", recordaron en el PSOE. Otra cosa es que intenten, como han anunciado algunos grupos, ponerse de acuerdo para elegir a un candidato alternativo en la investidura. Es difícil: las fuerzas de izquierda siguen descartando a la portavoz del PP y el PP descarta a Podemos o IU, a las puertas de otras elecciones generales. 

"Hace tres años -cuando una edil del PSOE se fue a la oposición y dejó al gobierno en minoría- se rompieron las reglas de juego democráticas, se inició una campaña de acoso y derribo contra el alcalde" y una "campaña contra la ciudad", con el "bloqueo" a los presupuestos, la integración en el Opaef y el Plan de Pago a Proveedores, destacó el hasta ayer alcalde, pero "si el problema soy yo ahora pueden demostrarlo", "les pido a  que trabajen por los alcalareños". Verónica Pérez insistió en que el PSOE tiene la "mano tendida" , que quieren "iniciar esta nueva etapa desde el diálogo y el entendimiento" y reconoció la trayectoria de Limones: "Es un referente de la buena gestión socialista", "Alcalá ha pasado de ser un pueblo con muchas dificultades a ser una ciudad de futuro, que se ha colocado en el mapa como referente e industrial". "Me siendo tremendamente orgullosa de él", "esto no es un adiós, se va para asumir una nueva responsabilidad", apostilló. 

El ya ex alcalde aprovechó también para hacer su balance: Alcalá ha pasado de ser un "pueblo", en el que "ni siquiera el Castillo era de los alcalareños, a ser una ciudad equipada en "todos los ámbitos", "capital cultural del área metropolitana", donde la Junta tiene más inversiones en Andalucía, con la conexión con el Metro y el desdoble de la carretera a Dos Hermanas -proyectos paralizados, se deben retomar aún- y dos importantes programas europeos de regeneración urbana". "Esto no es una manera de despedirse, uno nunca se va de donde tiene sus amores y querencias. Soy de Alcalá y he llegado donde los alcalareños han querido". "Esto es un paso adelante", subrayó.